La mayoría de los jefes comunales bonaerenses peleará por su reelección

En unos 100 municipios irán por la continuidad; algunos intendentes históricos, desplazados

La mayoría de los intendentes de la provincia de Buenos Aires quedaron habilitados ayer para competir por su reelección. Pero un puñado de barones históricos del conurbano quedó sorpresivamente fuera de juego.

Un total aproximado de 111 de los 135 jefes comunales se presentaron en las primarias para plebiscitar sus candidaturas. Al cierre de esta edición, la mitad de estos alcaldes sólo cumplía con un trámite de oficializar su postulación. Cincuenta y cuatro jefes comunales pelearon en las urnas la compulsa contra dos o incluso tres adversarios internos para legitimar un nuevo mandato en las generales de octubre. La mayoría ganó. Pero en un puñado de municipios, los históricos barones del conurbano fueron desplazados. Por caso, Mariano West, el histórico intendente de Moreno. Y Raúl Othacehé, de Merlo. Las contiendas más duras se registraron en La Plata, Merlo, Quilmes y Moreno, donde los votos se contaban al cierre de esta edición.

En La Plata el intendente local Pablo Bruera se midió ayer con Florencia Saintout en la contienda del Frente para la Victoria. Bruera se imponía anoche sobre Saintout. "Hemos ganado la elección interna", anunció anoche Bruera.

En cambio, no le fue bien al intendente de Moreno. Mariano West, un histórico dirigente peronista que compitió con el dirigente de La Cámpora Walter Festa, quedó afuera. West reconoció: "Así es la democracia, acompañamos la decisión del pueblo con todo respeto".

Otro dirigente de La Cámpora, Diego Barrale, se impuso al intendente de San Vicente, Daniel Di Sabbatino. En Merlo el intendente Raúl Othacehé, que apoyó a Julián Domínguez, compitió con Gustavo Menéndez, candidato avalado por Aníbal Fernández. La interna fue complicada ya que se presentaron 19 candidatos. Menéndez anoche se atribuyó el triunfo. "Merlo se liberó de sus cadenas", dijo. Othacehé -uno de los intendentes más antiguos del conurbano- desconocía la derrota al cierre de esta edición. En Quilmes el intendente Francisco "Barba" Gutiérrez compitió con Daniel Gurzi, seguidor de Fernández. Gutiérrez se adjudicó el triunfo. "Le gané a Gurzi por unos siete u ocho puntos", dijo Gutiérrez anoche a LA NACION.

En Florencio Varela, Julio Pereyra ganó la interna local del Frente para la Victoria contra otras tres líneas internas. "Gané con 40 por ciento de los votos", aseguró Pereyra. En tanto, en Ituzaingó, el intendente Alberto Descalzo enfrentó y ganó a Daniel Larrache, titular de Nuevo Encuentro en el distrito que compitió en la interna FPV. Esta interna dejó en claro la difícil situación que deberán afrontar ahora algunos de los barones del conurbano: tras dar una feroz batalla con un hombre de Sabbatella que se interpuso en sus caminos, ahora deberán hacer campaña para la fórmula de Sabbatella y Fernández a la gobernación.

"Ganamos por un amplio margen", dijo anoche Descalzo a LA NACION. El jefe comunal buscará en octubre su reelección. En Morón, en cambio, se habría impuesto en la interna oficial Martín Sabbatella, hermano del candidato a vicegobernador.

En Esteban Etcheverría el intendente Fernando Gray se imponía por sobre otros tres contrincantes en la interna del FPV con el 40%. En Almirante Brown el ex intendente massista Darío Giustozzi enfrentó a Mariano Cascallares, actual titular del Instituto de Previsión Social. Este último se atribuía el triunfo.

En el Frente Renovador, el intendente Luis Acuña, de Hurlinghan, perdería ante al candidato del Frente para la Victoria, Juan Zabaletta.

En San Isidro fue más fuerte fue la interna de Cambiemos: el intendente Gustavo Posse, que intenta retener la intendencia, ganaba en internas a otros tres competidores de Cambiemos, entre ellos el hombre de Mauricio Macri en el distrito, Guillermo Montenegro, actual ministro de Justicia y Seguridad de la ciudad autónoma de Buenos Aires. Un caso distinto, acaso simbólico, es el de La Matanza: el intendente Fernando Espinoza, que apostaba a ser vicegobernador, dejó como sucesora a Verónica Magario, que se imponía ampliamente en la interna del FPV..

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