De qué hablamos cuando hablamos de inclusión. Ese concepto quizás sea lo que mejor refleje estos años de gestión kichnerista en las áreas sociales. Educación, salud, género, ciencia, todas estuvieron atravesadas por la búsqueda de un país más justo y equitativo, con avances y desarrollos productivos, creando perfiles a futuro, en un proceso que no quedó exento de deudas, temas no tratados, leyes no implementadas, y algunos déficit en el momento de aplicar la "sintonía fina". Ahora vendrá el tiempo de ver y analizar si el próximo gobierno se encargará de continuar por la ruta avanzada y dar esos debates, o si preferirá erigir otro camino con otros objetivos.

El área de salud puede ser un fiel reflejo de este sesgo inclusivo. Sucobertura es universal y gratuita en el sistema público para cualquier persona que transite suelo argentino. La Ley de Prescripción de Medicamentos por Nombre Genérico y el programa Remediar fueron pilares de una política de accesibilidad impulsada desde el Plan Federal de Salud de 2004 por el entonces ministro Ginés González García. Se creó el Instituto Nacional del Cáncer y el Calendario Nacional de Vacunación resultó uno de los más completos del mundo: de las 19 vacunas actuales, 13 se incorporaron desde 2003. Luego de atravesar la crisis de Gripe A en 2009, el país certificó en 2013 la erradicación del sarampión, la rubéola y el síndrome de rubéola congénita. La mortalidad infantil descendió del 16,5 por mil en 2003 al 10,8 en 2013. Dos leyes marcaron el área: la de Muerte Digna, de 2012, y la de Fertilización Asistida, aprobada en 2013, aunque todavía da lugar a libres interpretaciones por parte de los prestadores de la salud.

En materia educativa, lo primordial fue la mayor cantidad de chicos en la escuela, número que progresó significativamente en estos 12 años por la obligatoriedad de las salas de 5 y 4, y de la secundaria. "La tasa de escolarización en la infancia tuvo mejoras en la asistencia en cobertura y la matrícula creció un 26,7% entre 2003 y 2014", resalta Diego Igal (ver página 7).

La cobertura en educación primaria llegó a ser una de las más altas de América Latina (99,8% el año pasado). Las escuelas técnicas pasaron a tener una ley propia bajo esta gestión y se revalorizaron las carreras de ingeniería en el plano universitario. El plan Conectar Igualdad distribuyó más de 5 millones de netbooks en las secundarias, se idearon dos canales educativos de TV; se creó el Instituto Nacional de Formación Docente y el Plan Nacional de Lectura. Pero quedaron deudas pendientes, muchas mencionadas en este tiempo por el propio ministro Alberto Sileoni: aumentar el egreso en el secundario y en el terciario, mejorar los índices de abandono; crear más escuelas de doble jornada, que sigan descendiendo las repitencias y generar un debate entre todos los sectores de la educación para proyectar una mejora de "calidad educativa".

En el tema presupuestario, la norma que creó el Ministerio de Ciencia le destinó al menos un 0,6% del Presupuesto Nacional, y gracias a la Ley de Financiamiento Educativo, la inversión en educación pasó de representar el 3,77% del PBI en 2003 al 6,47% en 2011. Las leyes también son símbolos de esta época.

En ciencia se sumaron otros números que demuestran un cambio de paradigma. Tal como señala Roly Villani (ver página 6), "en 2008 se registraban 5301 investigadores en la Carrera del Investigador Científico y Tecnológico y 6143 becarios del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), mientras que en 2015 ascendieron a 9146 y 10.784 respectivamente".

Se creó el Polo Científico Tecnológico en las ex bodegas Giol, y gracias al Programa Raíces retornaron casi 1300 científicos. Otros avances científicos incorporaron términos ya clásicos para la conciencia popular argentina. Uno es el ARSAT (I y II). Entre 2014 y 2015, el país se convirtió en el primero latinoamericano (y el octavo en el mundo) en tener en órbita un satélite geoestacional de telecomunicaciones diseñado y fabricado en su propio territorio. Se le sumará el lanzador Tronador II, con el que podrá poner en órbita sus propios satélites. La otra iniciativa no necesita demasiado prólogo: Tecnópolis. La megamuestra de ciencia, tecnología, industria y arte más grande de América Latina, que en cinco años fue visitada por más de 22 millones de personas, lo que habla de un horizonte nacional con la ciencia como un faro ineludible.

En términos de género y diversidad sexual, los avances fueron notables, tanto para promover la igualdad, como para prevenir y eliminar la violencia y la discriminación. Ley de matrimonio igualitario, de identidad de género, de educación sexual, de acceso a anticonceptivos e información, de combate a la trata, y la incorporación del femicidio al Código Penal son algunos ejemplos. Sin embargo, en algunos casos, como sucedió con la ley de violencia de género, la aplicación de esas normas encontró varios obstáculos, muchas veces de parte de la justicia, con fallos escandalosos como la primera sentencia del juicio por la desaparición de Marita Verón. "Más allá de los claroscuros, quedan las deudas, la principal de ellas, la sanción de una ley de interrupción voluntaria del embarazo", expresa Lucía Álvarez.

Hace cuatro meses entró en vigencia el nuevo Código Civil y su unificación con el Comercial. Fue la primera gran modificación de esa normativa desde 1869. Florencia Halfon Laksman explica que, al entrar en vigencia el nuevo cuerpo normativo, algunos trámites se simplificaron: "En sus capítulos 63 y 64, el flamante Código cambia las reglas a la hora de dar nombre y apellido. Ahora se permiten los nombres extranjeros o de pueblos originarios y el único límite es que lesione la dignidad de la persona". El cuerpo normativo hace foco en los derechos del niño o adolescente, innovando en el Derecho de Familia, y propone un modelo democrático, no piramidal. Otra novedad es la defensa de los consumidores y la facilitación en los trámites de los divorcios –no sin protesta de la Iglesia Católica, que pareció triunfar en la aprobación de que la existencia humana comienza con la concepción–. Una discusión aún irresuelta es el debate por la delimitación de los ríos. El acceso al agua potable como derecho fundamental, la fecundación posmortem y la maternidad subrogada quedaron como temas pendientes. «

 

Otras deudas

 

Algunos temas pendientes giran alrededor de mayores sanciones en la política vial y, en materia de seguridad,  de un aumento en la difusión de estadísticas.Si bien en este período no se criminalizó la protesta y se elaboró un proyecto de reforma del Código Penal, falta aún una mayor institucionalización por parte de todos los poderes y mejorar la prevención del delito. También es necesaria una reforma de las policías y los sistemas carcelarios, especialmente en lo que respecta a los provinciales y a la sobrepoblación de presos sin condenas firmes.