El empresario Lázaro Báez cambiará en los próximos días de abogado en la causa en la que está preso por lavado de dinero. Su nuevo defensor será Máximiliano Rusconi, un hombre con experiencia en el fuero federal lavado y especialista en delitos de evasión y lavado de dinero.

Rusconi visitó a Báez en la cárcel de Ezeiza y ya le firmó el poder para designarlo como nuevo abogado en la causa que llevan el juez federal Sebastián Casanello y el fiscal Guillermo Marijuán.

El nombramiento todavía no se efectivizó en el juzgado de Casanello porque hubo un problema administrativo de sellado del poder del Servicio Penitenciario Federal. Entre mañana y pasado, Rusconi presentará el escrito.

Así, Báez irá por su tercer defensa en la causa. Sus primeros abogados fueron Nicolás Guzmán y Gabriel Gandolfo, que después de tres años renunciaron en marzo pasado. Su lugar fue ocupado Daniel Rubinovich y el ex juez Rafael Sal Lari, quienes serán reemplazados por Rusconi,

"Vamos a empezar a trabajar de manera técnica y cuestionar que en la causa haya una maniobra de lavado de activos. Creemos que no está confirmada la acción propia de lavado y recién ahora se va a empezar a determinar el delito precedente", le dijo a este medio un allegado a la nueva defensa de Báez.

Rusconi fue de 1999 a 2001 titular de la Unidad Fiscal para la Investigación de Delitos Tributarios y Contrabando (UFITCO) de la Procuración General de la Nación y es especialista en delitos tributarios y de lavado, sobre los que da clases en distintas facultades.

El gobierno de Mauricio Macri iba a proponerlo como fiscal ante la Cámara Federal de Casación Penal, pero luego frenó su pliego.

Como abogado actuó y tiene casos de impacto político. Fue el defensor del ex presidente Carlos Menem en la causa por el tráfico de armas a Croacia y Ecuador; del perito informático Diego Lagomarsino en el caso por la muerte del fiscal Alberto Nisman –abogados de su estudio lo sigue defendiendo–; y en la actualidad patrocina al empresario Nicolás Ciccone en la causa en la que está procesado el ex vicepresidente Amado Boudou.

En los últimos tiempos, Rusconi llegó a la causa en la que está preso y procesado el ex secretario de Obras Públicas José López. Allí es el abogado del empresario Andrés Galera, acusado de ser el testaferro de López como dueño de su casa del Tigre, donde guardaba los nueve millones de dólares con los que fue detenido.

Baéz atraviesa su peor momento desde el inicio de la causa en mayo de 2013. El empresario cumplirá el próximo lunes cinco meses preso, tiene dos procesamientos confirmado por lavado de dinero y el juez Casanello ya inició el proceso para enviarlo a juicio oral.

Además, Báez tiene otros procesados abiertos. En uno de ellos, los fiscales Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques pidieron su indagatoria y la de la ex presidente Cristina Kirchner por las irregularidades en las obras viales que el empresario recibió.