En el marco de un homenaje a los policías federales caídos en cumplimiento del deber, el presidente Mauricio Macri dijo que “esta condición de servir incluye un riesgo muy grande. Y en los tiempos que vivimos, son mayores los riesgos. Porque hemos decidido en esta etapa de la Argentina enfrentar a la violencia y al narcotráfico”.
Asimismo, el mandatario manifestó: “no voy a permitir y voy a batallar lo que es la naturalización de la muerte de un policía”. “Cada muerte, cada pérdida es dolorosa y es un llamado a la paz”, indicó el jefe de Estado.
Por último, deslizó que “queremos seguir trabajando juntos por la tranquilidad del país”.
Macri, quien estuvo acompañado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el jefe de la Policía Federal, comisario general Néstor Roncaglia, y miembros de la plana mayor de esa fuerza, le agradeció -en nombre de todos los argentinos- a los familiares de los caídos y les entregó una Medalla Púrpura.
Además, estuvieron presentes el secretario General de la Presidencia, Fernando De Andreis, y el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó.
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