Massa recibió a Lacunza; Vidal define a su “NN” 2017 y atrae más al peronismo

Massa recibió a Lacunza; Vidal define a su “NN” 2017 y atrae más al peronismo

 BOLETA ÚNICA PARA LAS LEGISLATIVAS Y PROMESA A LA UCR.

• EL FACTOR MANES

El encuentro, que se mantuvo hasta ahora en la más absoluta reserva, corrió hace una semana, el primer fin de semana de noviembre en Tigre. Sergio Massa recibió en su casa a Hernán Lacunza, el ministro de Economía de la provincia de Buenos Aires. El jefe del Frente Renovador estaba acompañado por Marco Lavagna y Juan José "Vasco" Amondarain. En ese cónclave se destrabó la aporbación del Presupuesto 2017 de María Eugenia Vidal. Fernando "Chino" Navarro, recién llegado de Washington, aportaría al menos seis votos. En cuanto a la autorización de endeudamiento, el massimo no alcanza en la Legislatura bonaerense. Para alcanzar los dos tercios de los votos hace falta la "colaboración" del denominado "Grupo" Esmeralda", de Martín Insaurralde y Gabriel Katopodis. 

El invisible Florencio Randazzo ya sondea voluntades en el massismo. Y tienta a Felipe Solá, Facundo Moyano y Héctor Daer para volver al peronismo no-massista el próximo año. Otros peronistas dispersos, cercanos a María Eugenia Vidal, también analizan la posibilidad de presentar una formación electoral propia en 2017, lejos de Massa, de Randazzo y por supuesto, del dúo Cristina de Kirchner-Daniel Scioli. Se trata de los intendentes de Ezeiza y José C. Paz, Alejandro Granados y Mario Ishii. Granados viene de organizar un partido de fútbol con ministros y secretarios de Vidal el mismo día en que el peronismo bonaerense se había convocado en Lobos para explorar un principio de unidad. Ishii viajó a Washington con macristas.

Vidal reestructuró su gabinete con dos ganadores claros: Federico Salvai y el peronista Joaquín de la Torre. El primero logró un up grade político formal que ya venía ejerciendo de facto. Fue oficializado como jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires y se convirtió en el hombre con más poder en ese distrito. De la Torre había llegado hace poco a Cambiemos como ministro de la Producción en reemplazo del radical Jorge Elustondo. A los pocos meses de haber asumido fue premiado en la reestructuración con el Ministerio de Gobierno, el cargo que ejercía Salvai, ahora jefe de Gabinete. 

De la Torre sigue visitando intendentes. El jueves pasado estuvo en un asado con tres jefes comunales del Frente para la Victoria: Oscar Ostoich (Capitán Sarmiento), Ricardo Casi (Colón) y el anfitrión Ricardo Alessandro (Salto). El nuevo Gabinete de Vidal es una señal al kirchnerismo y al massismo residual, de donde proviene De la Torre, de cara a las legislativas 2017. Y también una demostración de volumen político dentro de Cambiemos, dirigida especialmente a Emilio Monzó con quien Vidal ya firmó las paces. 

Los radicales del vicegobernador Daniel Salvador todavía no mordieron ningún cargo tangible en el nuevo Gabinete. Para eso está Facundo Manes, experto en cerebros. El neurólogo responde al perfil de NN que necesita Vidal para construir un candidato a senador nacional 2017 que no le haga sombra en 2019. No tiene mochila política negativa y sirve para el propósito de desperonizar la provincia de Buenos Aires. De todo lo demás se encargaría el aura todopoderosa de la gobernadora, quien debería trasladar su imagen positiva a un candidato sin rechazo previo en la opinión pública. 

Como anticipó este diario, ante la sobreoferta de grupúsculos peronistas para 2017 (cristinistas, randazzistas, massistas, independientes), Vidal se encamina a unificar las candidaturas de Cambiemos en una sola boleta para las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias. Casi una re-versión de "Unidos y Organizados" pero del PRO. 

La gobernadora se reunió el martes pasado con su vice, Salvador, y el titular del Comité Nacional de la UCR, José Corral, con quienes acordó "preservar" Cambiemos y realizar "todos los esfuerzos" para alcanzar listas por "consenso" en todo el territorio bonaerense.

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