Créditos hipotecarios para trabajadores en negro. Para mantener su campaña presidencial sobre la senda de las propuestas, Sergio Massa propuso ayer un plan para crear 1,2 millones de viviendas en cuatro años a través de créditos en pesos de la banca privada, pero con tasas aseguradas por el Banco Central. El programa prioriza el acceso al crédito de los jóvenes y los trabajadores informales, que deberían presentar una declaración jurada de bienes.

Massa hizo el anuncio desde Malvinas Argentinas junto al intendente Jesús Cariglino, lo que significó la primera foto de ambos luego de que el jefe comunal partiera hacia Pro y regresara al Frente Renovador, denunciando el antiperonismo de Mauricio Macri. El encargado de explicar técnicamente la propuesta fue el ex titular del Banco Central Aldo Pignanelli, convertido en el orador más apasionado de la jornada.

"Desde el Banco Central vamos a obligar a los bancos privados a que usen la guita que tienen guardada para el crédito. ¡Porque somos peronistas!", prometió Pignanelli. "Salvo en los gobiernos peronistas, acá el crédito se lo llevaron siempre los ricos", continuó, para advertir que el kirchnerismo prefirió financiar al 6% los "casinos de Cristóbal López" antes que las viviendas. "Macri propone garantizar el alquiler. Massa garantiza la propiedad", completó.

En el Frente Renovador explicaron que la idea de centrar el programa de viviendas en los trabajadores informales y los jóvenes se debe a que son el grupo mayoritario dentro del "30% de la población que busca una vivienda propia. No es culpa de la persona, sino del país, cuando hay un trabajador en negro".

"Hoy las parejas jóvenes se amontonan en las casas de sus padres o sus abuelos porque tenemos un programa de viviendas chiquitito que depende de Riberito", señaló Massa, en alusión al Procrear y a los sorteos de créditos a través de Lotería Nacional. Contrastó ese programa con su plan, a través de sus autores: "Tenemos un equipo de economistas formado en combate", remarcó, en alusión al grupo que comanda Roberto Lavagna, ministro de Economía durante la recuperación post-2001. En primera fila estaba Marco Lavagna, economista como su padre y candidato a diputado por la Capital.

"Hablamos de usar bien los recursos del Banco Central. Hoy se usan para pagar los errores de [Axel] Kicillof y tapar los agujeros de una economía que sólo genera empleo para los punteros de La Cámpora", continuó Massa. Fue luego de que Pignanelli indicara que el plan de vivienda contempla un financiamiento a 20 años, con una tasa de 10% anual, garantizada a los bancos por fondos del BCRA.

El plan supone la creación de un millón de empleos directos e indirectos en cuatro años, a partir del cálculo de que cada vivienda requiere tres trabajadores y genera una demanda indirecta de otros tres.

Cariglino facilitó la escenografía para el anuncio: el complejo de viviendas Los Álamos, que construyó el municipio frente a la intendencia. "Acá vino el Gobierno con fotos y cámaras para anunciar 10.000, 5000 viviendas. No enviaron las partidas, las pagó el municipio", dijo Cariglino. También elogió "la vida y esperanza" detrás del proyecto de Massa. Una caricia extra, para dejar atrás viejas tensiones..