La diputada provincial Gabriela Martinich se refirió a la denuncia que realizó sobre agua contaminada en el municipio de Tartagal y expresó que el problema se remonta al año pasado, cuando surgieron los primeros casos de diarrea en esa localidad.

Por ello, solicitó pedidos de informe al Ministerio de Salud, el Ente Regulador y la empresa Aguas del Norte.

La alerta sanitaria surgió a raíz de los numerosos casos de diarrea en el hospital de Tartagal. Según el informe del nosocomio, los pacientes se habrían enfermado al consumir agua potable, la cual contiene un parásito, que es un habitante común en la planta potabilizadora ya que no se eliminó, precisó la legisladora.

Explicó que el problema se acrecienta aún más si se tiene en cuenta que los huevos que deja el parásito se están volviendo más resistentes, por lo que será más difícil combatirlos.

Recordó que el año pasado mantuvo una reunión con el director de Aguas del Norte, Roque Mascarello quien en esa oportunidad reconoció que una de la piletas estaba sin mantenimiento.

Martinich criticó la inacción de los responsables, ya que existen encargados de mantener en condiciones la planta potabilizadora.

Dijo que ante la Cámara de Diputados no sólo reiteró el pedido de informe, sino que pidió sanciones para la empresa, no sólo por la falta de controles sino también porque nunca se descontó dinero en la factura de agua que pagan los tartagalenses.