Claramente las autoridades políticas de Tres de Febrero y los jefes policiales no pueden resolver la crisis de seguridad por la que atraviesa el partido desde hace ya varios años. 

Esta noche, la calle Santos Vega  y la estación José María Bosch fueron nuevamente puntos de encuentro para una multitudinaria marcha bajo un único pedido: Seguridad.

Hubo mucho dolor, manifestaciones de indignación, y el relato desconsolado de la abuela y la mamá de Matías Gandolfo, que a días del crimen del joven siguen sin encontrar reparo.

“Le clavaron un destornillador en el corazón, en los pulmones, y en el pecho, cinco veces, y Matías quedó en un charco de sangre”, contó su abuela. “Encontramos a mi hijo muerto”, agregó la madre, y sostuvo que la marcha no es solo por Matías, si no por todas las víctimas de la inseguridad.

La protesta que inició en la esquina donde el joven fue asesinado por un delincuente en la noche del lunes, tuvo su mayor convocatoria cerca de las 19 horas con más de 500 personas. Allí acordaron reclamar ante el intendente municipal Hugo Curto el próximo lunes a las 18:30 horas en Caseros, coincidiendo con una marcha por Agostina Brega, maestra jardinera asesinada en Villa Pineral en marzo de este año.