En diversas ciudades de Venezuela, pero fundamentalmente en Caracas, se realizaron ayer manifestaciones de protesta para reclamar la liberación de Leopoldo Lópe z, quien ayer cumplió 110 días tras las rejas de un penal militar, y además de todos los presos políticos. Pero también, para reactivar las movilizaciones, que se habían desactivado en los últimos días por las fuertes medidas represivas del gobierno exigiendo la renuncia del presidente Nicolás Maduro.

En Caracas, la movilización convocada por el partido Voluntad Popular se celebró en la plaza Brion de Chacaíto a la que asistieron los dirigentes María Corina Machado, Freddy Guevara, el alcalde David Smolansky, la estudiante Gaby Arellano, entre otros, bajo la consigna de trazar la “ruta constitucional que permita la liberación nacional del régimen antidemocrático de Nicolás Maduro. La Salida es constitucional”. En otras ciudades como Maracaibo, Puerto Ordaz, Ciudad Bolívar, Mérida, San Cristóbal, Barcelona, Puerto La Cruz y el Tigre, también hubo asambleas populares para definir la nueva etapa de la lucha de resistencia, que no es otra cosa que la movilización y organización de la gente en la calle, cuyo objetivo es reclamar “elecciones presidenciales anticipadas”, según anunció la diputada María Corina Machado.

Los opositores, en su mayoría vestidos de blanco, llegaron de distintas partes de la capital venezolana y bajo la consigna “La salida es constitucional”, colmaron el espacio que sirvió, el pasado 18 de febrero, de escenario a López durante su entrega a las autoridades venezolanas. Machado, quien junto a López, impulsó la llamada “salida” de Maduro, a través de las protestas callejeras, fue acusada en días pasados por el gobierno de estar involucrada en los presuntos planes de magnicidio y golpe de Estado, tras lo cual la Fiscalía la citó ante la justicia para el próximo 16 de este mes. “El lunes 16 todos a la Fiscalía. Vamos a demostrarle a este régimen que ha llegado la hora de la resistencia y de la libertad”, expresó.

López, jefe de Voluntad Popular, ha tenido que volver al penal de Ramo Verde luego de protagonizar una larga audiencia preliminar la semana pasada que duró tres días interminables, en la que la justicia decidió procesarlo y que siga preso. Según su esposa, Lilian Tintori, López ya estaba a punto de ser liberado, pero la jueza Adriana López habría recibido presiones por parte de la Fiscalía General para que continuara en prisión y para que sea enjuiciado a partir de agosto próximo.

Con su barba crecida, López, vestido con una remera blanca, logró sacar dos fotos suyas tras los barrotes de su celda. Y transmitió un mensaje en el que acusa a la juez Adriana López de corrupción: “No vale, qué justicia, usted ciudadana juez decidió vender su conciencia”.

El gobierno de Maduro inició una cacería de brujas contra los políticos opositores y los editores de los medios de comunicación, los pocos independientes que quedan, como el editor de El Nacional Miguel Henrique Otero y su hija Alejandra Otero Ramia que fueron citados a declarar hoy en la sede de la policía política, ahora llamada Dirección de Investigaciones Estratégicas del Servicio Bolivariano, Sebin (ver aparte).

El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, ha denunciado que hay unos 23 políticos, intelectuales y gente de los medios de comunicación en la lista que van a ser citados como testigos de un presunto plan de magnicidio y golpe de Estado contra Maduro, que es el décimo tercero que denuncia en apenas catorce meses que lleva en el poder.

La Mesa de Unidad Democrática no secundó abiertamente la concentración de ayer ni las protestas convocadas por López y Machado en febrero pasado, algunas de la cuales derivaron en hechos de violencia que dejaron un saldo de 42 muertos, cerca de 800 heridos y cientos de detenidos.