Explicó que no quería obviar detalles ni errar fechas y que, por ello, prefirió presentar un escrito. El gobernador Juan Manzurconfirmó a LA GACETA que durante la mañana de ayer se presentó ante el juez federal Claudio Bonadíoen su despacho de los Tribunales de Comodoro Pypara declarar a raíz de la causa por presuntas irregularidades en la licitación del plan Qunita, del Ministerio de Salud de la Nación. Sucede que el mandatario encabezó esa cartera desde julio de 2009 y hasta febrero, cuando volvió a instalarse en la provincia para retomar la vicegobernación. 

Manzur reiteró a LA GACETA que durante su gestión se había iniciado el expediente para la compra de los insumos del programa destinado a beneficiarias de la asignación universal por embarazo. Afirmó que el procedimiento, hasta ese momento, se adecuó a los parámetros de la Sindicatura General de La Nación (Sigen) y de otros órganos de contralor. En un principio, según afirmó, no hubo observaciones por parte de estos sobre el procedimiento administrativo.

El de ayer fue un hecho inédito dado que nunca antes un mandatario tucumano había concurrido a Comodoro Py en funciones, aunque la convocatoria fue por su puesto nacional. Manzur viajó especialmente, aunque tenía previstas algunas reuniones relacionadas con la gestión provincial. La gobernación quedó en manos del vice, Osvaldo Jaldo.

El martes había sido el turno del actual ministro de Salud nacional, Daniel Gollán, quien sucedió a Manzur. El funcionario se abstuvo de declarar. Para hoy, en tanto, está citado el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

A principios de octubre, Bonadío había citado a declarar a una veintena de imputados, entre funcionarios nacionales de primera y segunda línea, y empresarios beneficiados por la licitación de ese programa. 

Por el despacho del magistrado ya pasaron, además, el viceministro de Salud, Nicolás Kreplak, y los dueños de Fasano SRL, Dromotech, Compañía Comercial Narciso, Grupo Diela SR, Fibromad y Delta Obras y Proyectos, entre otros. Luego de la ronda de indagatorias, el juez determinará si encuentra motivos para seguir investigando -en este caso podría procesar a los imputados y estos pueden apelar- o dictar una falta de mérito y sobreseer finalmente a los denunciados.

La denuncia

La causa se inició por la denuncia de la legisladora porteña y ex ministra de Salud,Graciela Ocaña. La denunciante también fue recibida por Bonadío ayer. 

De acuerdo con la agencia DyN, entregó un kit semejante al del plan Qunita y acompañó facturas de un comercio minorista por $ 4.100 (el Gobierno pagó $ 7.850 en la licitación, de acuerdo a lo que ella sostuvo).

Qunita había sido presentado por la presidenta Cristina Fernández en julio y prevé la entrega de un kit maternal para recién nacidos. El combo incluye una cuna encastrable, sábanas, toallas, ropa de bebé, un termómetro digital y cremas, entre otros. De acuerdo con Ocaña, se habrían adquirido 150.000 kits que costaron $1.100 millones. 

Según la denuncia, se habrían pagado sobreprecios y la mayor adjudicataria de la licitación resultó ser Fasano SRL que, según indicó, se dedica a los negocios inmobiliarios y en 2014 habría tenido una facturación de apenas $ 6.000.

“Esquivador serial” de causas

El diputado José Cano consideró que no alcanza con que Manzur presente un escrito. “Tiene la obligación de sentarse frente al juez y dar explicaciones detalladas en una causa en la que se ha puesto la lupa sobre partidas millonarias que beneficiaron a firmas casi inexistentes. Es un esquivador serial de causas sobre corrupción”, sostuvo.