Manuel Courel, jefe de Gabinete de Yerba Buena, espera que se normalice la situación en el Concejo Deliberante de esa ciudad. Confía en que la Intendencia pueda trabajar en forma conjunta con el órgano deliberativo para dar solución a los múltiples problemas de la “Ciudad Jardín”. También, el funcionario espera que el conflicto político entre los ediles no afecte la gestión municipal. Agregó: “Si no hubiera un acuerdo, nosotros seguiremos trabajando como lo venimos haciendo ahora”, advirtió.

A modo de resumen del encuentro del miércoles en Casa de Gobierno, entre el vicegobernador Osvaldo Jaldo y el intendente Mariano Campero, afirmó: “Quedó claro que en esta reunión no hubo un acuerdo de ningún tipo, sino simplemente un diálogo”.

El funcionario recalcó que “el problema del Concejo Deliberante es un problema del Concejo Deliberante”. Dijo que a lo largo del año hubo un “Concejo paralizado” e instó a que se desarrolle un espacio de entendimiento y colaboración entre el municipio y el órgano deliberativo local.

“Ningún vecino quiere que haya luchas estériles que no llegan a nada. Ni quieren ver un Concejo que ponga obstáculos a todas las cosas que quiera hacer el Ejecutivo. Los vecinos quieren que trabajemos para solucionar sus problemas. Ni más, ni menos”, reprochó.