El 16 de enero de 2009, Néstor Lorenzo, empresario farmacéutico y principal acusado en la causa por “la mafia de los medicamentos”, habló por teléfono con Claudio Ferrari, el gerente de finanzas de la Obra Social de La Bancaria, quien también está procesado en el expediente. En la conversación -que es parte de la investigación que lleva adelante el juez Norberto Oyarbide--nombran a “Fabio, el oftalmólogo de la Presi” , como uno de los miembros de “un grupo pensante” que estaba intentando subsanar una situación compleja: había cheques de La Bancaria en manos de Esteban Ibar Pérez Corradi, un financista acusado de narcotráfico por la justicia de Estados Unidos.

En diálogo con Clarín , Lorenzo confirmó las sospechas : cuando se referían al oculista estaban hablando de Fabio Bartucci, “el oftalmólogo de La Bancaria y del matrimonio Kirchner”, especificó. Esta afirmación fue parte de la larga entrevista que el empresario detenido dio en exclusiva a este diario desde la cárcel.

La escucha es reveladora. Según consta en el expediente, Ferrari le preguntó a Lorenzo en aquella charla de 2009: “Dice que le estamos comprando a un tal Corradi que está preso, ¿quién es ese?”.

-- Lorenzo : Es un financista que tenía los cheques de Forza, que yo le di a Forza y los tiene Corradi.

-- Ferrari : Mirá, en estos momentos los que estamos tratando este tema somos Fabio, él, Luna.

-- Lorenzo : ¿Y Fabio quién es? Ferrari: Fabio, el oftalmólogo.

-- Lorenzo : Ah.

-- Ferrari : El médico de la Presi.

-- Lorenzo : Pero ese no puede defender nada, es un tema técnico.

-- Ferrari : No, no, es decir ... el grupo pensante que está manejando todo esto somos Ferrero, Paula, Luna, Fabio y yo con el doctor.

En palabras claras, durante el diálogo Ferrari intenta explicarle cómo se componía la mesa chica que estaba lidiando con la incómoda situación que representaba que un hombre preso y acusado por narcotráfico reclamara el cobro de cheques de la obra social sindical. Hasta dónde llegaba la capacidad operativa del “médico de la presi” es una pregunta que todavía no está respondida en el expediente de Oyarbide.

Lo cierto es que sí hay información sobre el sinuoso camino de los cheques que salieron de la Bancaria pero terminaron en manos de Pérez Corradi, un hombre que pasó de empleado del Banco Nación a millonario en cinco años. Sus movimientos financieros llamaron la atención de la Unidad de Información Financiera, que realizó un informe que llegó al expediente de la mano del fiscal antilavado Raúl Pleé. El documento señalaba que estos y otros movimientos “revisten característica sospechosas” que podrían encuadrarse como el delito de lavado de dinero . Decía también que muchas operaciones fueron realizadas sin un sustento de actividades económicas reales por detrás.

Cuando habló con Clarín , Lorenzo dio su versión sobre cómo fue que Pérez Corradi recibió esos cheques: “Forza (Sebastián, asesinado en el Triple Crimen de General Rodríguez) hace una operación conmigo en noviembre de 2007. Su droguería ya estaba en concurso de acreedores y tenía un stock grande de mercadería que no podía vender”, explicó el empresario detenido: “Me la ofrece por cuatro millones de pesos y le ofrezco que me vaya haciendo entregas parciales mientras yo le voy entregando cheques de La Bancaria”.

Según el relato del empresario, “un día apareció Forza con Pérez Corradi en la oficina. Yo no lo conocía. Forza me lo presenta y me dice: ‘Esteban es un señor que me ha financiado durante mucho tiempo y tengo una deuda grande con él’”.

¿Por qué se lo presentó?, le preguntó Clarín a Lorenzo.

Forza me dice que el tipo me quería conocer porque él le estaba ofreciendo pagarle con cheques de La Bancaria. Entonces yo le mostré que eran genuinos y los endosé a Pérez Corradi.

En su declaración indagatoria, Lorenzo reconoció que todavía le debe ese dinero porque los cheques no tenían fondos.

Acusaciones de Lorenzo

En la edición de ayer Clarín publicó en exclusiva la primera entrevista que dio a un medio Néstor Lorenzo, procesado como jefe de una asociación ilícita dedicada a comercializar medicamentos robados y adulterados. Lorenzo es el centro de una trama que cruzó a la política con los sindicatos. Junto a él también está preso Juan José Zanola, titular de La Bancaria.

Durante el reportaje, Lorenzo reconoció haber aportado a la campaña presidencial de Cristina Kirchner y confirmó su buena relación con quien era recaudador K y superintendente de Servicios de Salud, Héctor Capaccioli: “Le entregué los cheques a Capacciolli, me hicieron los recibos y me fui”, dijo a este diario.

Además apuntó contra el titular de la CGT, Hugo Moyano, y su entorno: “al que tendrían que citar es a Juan Rinaldi (ex titular del Administración de Programas Especiales) pero como el señor es de Moyano, no le pasa nada”.

Defensa de Moyano

Néstor Lorenzo, en la entrevista que dio desde la cárcel y que Clarín publicó ayer, sugirió que el camionero Hugo Moyano también debería ser detenido en el marco de la causa por la mafia de medicamentos. Ayer cerca del jefe de la CGT le quitaron toda relevancia a las palabras de Lorenzo. “Es un procesado que está haciendo su defensa. Como dice el dicho, ‘la mejor defensa es un buen ataque’”, sostuvo Héctor Recalde, diputado nacional y asesor de Moyano. Recalde también recordó que una pericia encargada por el juez Claudio Bonadío a 18 troqueles de medicamentos de la obra social de Camioneros, que se sospechaba eran truchos, recientemente determinó que son auténticos.

En una nota dada a Página 12, Moyano definió ayer las acusaciones en su contra en esta causa como “El circo de la mentira”.