Macri fue operado y retomó su agenda de inmediato

Macri fue operado y retomó su agenda de inmediato

Se le extrajo un pólipo que le provocaba disfonía; fue la cuarta intervención en el año para el Presidente

 

"Si nos callamos todos, va a poder hablar." Las palabras del vocero presidencial, Iván Pavlovsky, lograron el objetivo. Los presentes en el salón comedor, pegado al despacho del Presidente, hicieron silencio. Sin forzar la voz, Mauricio Macri levantó su copa y realizó el brindis de fin de año con los periodistas acreditados de la Casa Rosada. Fue la primera actividad oficial del jefe del Estado tras la exitosa intervención en sus cuerdas vocales, una operación en la que se le extrajo un pólipo que le provocaba disfonía.

El Presidente fue sometido ayer a una microcirugía láser, durante la cual se le "reseccionó un pólipo en la cuerda vocal izquierda" que le provocaba trastornos de fonación "ante el uso intensivo/abusivo de la voz". La intervención, para la que se utilizó anestesia local, se realizó en el consultorio del médico otorrinolaringólogo Rafael Perrone y duró menos de diez minutos.

"Está muy bien. Antes de ir se tomó una pastilla para relajarse y cuando llegó a la Casa Rosada ya se puso a trabajar", describió ante LA NACION uno de sus hombres de confianza. Según confiaron fuentes oficiales, le habían despejado la agenda al mediodía para que descanse, pero ni bien pasaron unos minutos realizó algunas llamadas.

"Fue un año positivo para la Argentina, aunque todavía hay mucho por hacer. No es fácil, nunca dijimos que esto iba a ser un cambio fácil. En este camino compartido que emprendimos muchas cosas van a estar mejor el año que viene. Hemos recuperado la convivencia; la Casa Rosada se ha transformado en un espacio de tranquilidad y de respeto", dijo, en un tono bajo, el Presidente.

Si bien los especialistas indican que en los primeros días posteriores a la intervención hay que hablar poco y no exigir la voz, Macri sólo se tomó un par de horas antes de pronunciar un discurso en público.

Aunque se trató de un cuadro que médicos especialistas califican como frecuente y benigno, y que la cirugía es de las más sencillas que realizan los otorrinolaringólogos, esta fue la cuarta intervención por la que el Presidente tiene que recurrir a un consultorio médico en el año.

Primero se fisuró el arco posterior de la décima costilla mientras jugaba con su hija, Antonia, en la quinta Los Abrojos, y a mediados de junio se le realizó una artroscopia de rodilla, que lo mantuvo unas semanas alejado de las canchas de fútbol, que comparte con su gabinete, y partidos de paddle que realiza semanalmente con el titular de la AFI, Gustavo Arribas.

Pero la situación más grave fue la que atravesó el 3 de junio: luego de una reunión con periodistas en la quinta presidencial de Olivos, Macri fue trasladado a una clínica por una fibrilación auricular, donde se le aplicó una descarga eléctrica para regularizar el ritmo cardíaco. Por ese motivo, el Presidente estuvo internado durante casi cuatro horas en la Clínica Olivos.

"Las cosas que le pasaron son cosas habituales para un paciente de esa edad. Nos preocupa, como cualquier paciente que tenga alguna enfermedad, pero por suerte son cosas habituales, nada para temer", describió el director de la Unidad Médica Presidencial, Simón Salzberg.

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