El Jefe de Gobierno dijo que su administración “no puede” satisfacer los pedidos de vivienda de los habitantes de dicha villa de Retiro y aseguró ayuda siempre que no se interrumpa el tránsito de la autopista Illia.
“Nosotros ayudaremos a la gente de las villas mientras no se corte la autopista”, dijo el líder del PRO en una visita al Parque KDT.
Acompañado por su ministro de Seguridad, Guillermo Montenegro, el jefe comunal se quejó del incremento poblacional en el asentamiento precario del barrio de Retiro.
Según el mandatario, en 2003 vivían 5.000 familias en el lugar y hoy hay 50.000, hecho que atribuyó al Gobierno nacional, “que permitió el crecimiento de construcciones irregulares”.
“A pesar de haber tenido un fallo de la jueza Sarmiento que había dicho que no había que continuar con la construcción, siguió creciendo y ellos no se dan cuenta de la realidad de la situación”, se quejó.
Macri entiende que el corte de la autopista fue “una extorsión” y dijo que esas actitudes “tienen que ver con un mal manejo del Gobierno nacional de la seguridad y el respeto de la ley, independientemente de lo que hagan estas personas”.
Más temprano, el jefe de Gabinete nacional, Jorge Capitanich, había considerado que fue “una intervención activa por parte del Gobierno” nacional lo que permitió que se levantara el corte, que persistió por “inacción” del Ejecutivo porteño.
Cerca de la medianoche del lunes, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, anunció la liberación total de la autopista Illia, luego de encabezar un operativo llevado a cabo por fuerzas de Gendarmería y de abrir un canal de diálogo con los ocupantes.
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