El Gobierno volvió a utilizar las redes sociales para defender varias de las políticas que impulsó en los ocho meses de gestión. En una entrevista realizada por el sitio estadounidense BuzzFeed, y difundida en vivo por Facebook, Mauricio Macri defendió el tarifazo y culpó al kirchnerismo por el nivel de pobreza.

También desistió de debatir sobre el número de desaparecidos en la dictadura; calificó a Hefe de Bonafini de “desquiciada” y sobre Venezuela dijo que lo que “está pasando es un desastre”.

La conversación pasó por varios temas que dejó conceptos fuertes. El Presidente afirmó que los 1,4 millones de nuevos pobres estimados por el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) no surgieron durante los primeros meses de la gestión de Cambiemos sino que son consecuencia de un “blanqueo” de la situación que dejó el anterior gobierno. “El gobierno anterior se basó en la mentira. Alteró las estadísticas de todo, reprimió artificialmente la inflación”, cuestionó en el diálogo con el portal de noticias.

“Si cuando termine mi gobierno no reduje la pobreza, significa que fue un fracaso”, arriesgó. Otra de las consultas pasó por la cuestión del brusco aumento de las tarifas, donde el jefe de Estado insistió en que se hizo “lo más gradual que pudimos”. “No había alternativa, en ningún lugar del mundo se regala la energía”, completó para justificar el tarifazo.

Durante la entrevista, Macri se refirió al número de desaparecidos durante la dictadura. La estrategia presidencial fue evitar entrar en ese debate, pero luego confesó que no sabe cuántos son, “si son 9 mil o 30 mil los que están anotados en un muro o son muchos más”. Sobre el terrorismo de Estado, habló de “guerra sucia”, y remarcó que la prioridad de su gobierno “es esclarecer la verdad” y “trabajar en los derechos humanos del siglo XXI”. Consultado sobre si su gestión no va a apoyar los juicios de lesa humanidad, dijo que es una “cuestión judicial”, pero aclaró que no tomará los modos del kirchnerismo “donde se presionó e interfirió” a los jueces.

Como una forma de justificar su interés en la cuestión de los Derechos Humanos afirmó que por eso tiene “un secretario de Derechos Humanos”. Casi comete un furcio al confundirlo con “Recursos Humanos”.

Luego de la entrevista, desde el Gobierno trataron de minimizar los dichos del Presidente. Un asesor de Macri con despacho en la Rosada afirmó que “no hubo intencionalidad política” en el uso del término de “guerra sucia” y que utilizó “un sinónimo como si hubiese dicho ‘período oscuro’”.

El Presidente desistió de debatir sobre el

número de desaparecidos en la dictadura

 

También habló sobre la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini. Dijo que su detención no es “una persecución política”, y la calificó como una “desquiciada” que “dice barbaridades fuera de lugar hace varios años”.

Sobre la ex presidenta, afirmó que “Cristina no es mi aliada” y que “tiene una forma distinta de hacer política”. “Su estilo de conducción personalista... generó realmente controversia y rechazo’, sostuvo.

La situación política en Venezuela estuvo también presente en la charla. Macri consideró que lo que está pasando en ese país “es un desastre” y abogó por un referéndum. Y expresó que no está de acuerdo de que Venezuela asuma la presidencia del Mercosur.