Macri fue más agresivo y encerró a su rival con sus contradicciones

Macri fue más agresivo y encerró a su rival con sus contradicciones

Mauricio Macri salió ayer mejor parado del primer debate presidencial no tanto por sus habilidades como por los desaciertos de su rival. Se lo notó más confiado y menos tenso, o mejor dicho, menos enojado que Daniel Scioli.

Nunca perdió la calma y cumplió a rajatabla los tiempos establecidos para cada intervención. Fue más ácido e irónico y hasta sorprendió con un discurso más agresivo que el que venía exhibiendo en la campaña. No sólo se defendió con firmeza de los fantasmas del ajuste y la devaluación que intentó achacarle el postulante kirchnerista sino que atacó primero, y cada vez que pudo, con chicanas varias que buscaron dejar a la vista las contradicciones de Scioli con el modelo kirchnerista. "Daniel, ¿en qué te has transformado? Parecés un panelista de 678", o "Vos nos sos el cambio. Elegiste estar con Zannini, Máximo, Aníbal, Milagro Sala", fueron golpes directos a la mandíbula del oficialista, a quien llamó siempre por su nombre de pila.

También fue más sólido, aunque por momentos un tanto sobreactuado, al comunicar sus propuestas. Se confundió poco y, además, tuvo suerte. Uno de sus errores fue mirar a la cámara equivocada durante todo el debate para hablarle a los televidentes. Podría haber sido una catástrofe si no fuera por que a Scioli le pasó lo mismo. Otra equivocación fue afirmar que el Hospital Pedro de Elizalde está ubicado sobre la Avenida 9 de Julio, en lugar de la Avenida Montes de Oca, pero su rival dejó pasar la oportunidad de caerle al cuello. Es que el debate pareció un diálogo de sordos: ninguno contestaba las preguntas que le hacía su contrincante ni se salía del libreto. Con todo, Macri logró encerrar a su rival con sus contradicciones la mayor cantidad de veces. Al final, hubo lugar para su discurso conciliador y aperturista, como la convocatoria a todos los argentinos, con la tranquilidad de quien lidera las encuestas.

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