Luz, cámara, acción. El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, no para de transitar por los programas y las revistas del corazón. Su relación amorosa con la vedette Jésica Cirio le insume más tiempo que la gestión en un distrito que necesita los servicios primordiales. 

Desde 2009, las obras hidráulicas importantes para Lomas están suspendidas. El dinero que entró desde la Nación durante los gobiernos kirchneristas se volcaron a trabajos electoralistas y dejaron en estado de abandono temas clave, como el agua corriente y las cloacas.

Y esto provoca uno de los problemas más serios que tiene hoy el Conurbano bonaerense, especialmente la localidad gobernada por Insaurralde desde 2009: la contaminación de los niños con plomo y cromo. Según un estudio realizado por el Foro Hídrico de Lomas de Zamora, más de 900 chicos de Villa Lamadrid, Fiorito y Budge tienen altos porcentajes de plomo en sangre. 

“Hemos logrado detectar más de 970 casos, y seguro que hay más. Hoy por hoy, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no admite ningún tipo de porcentaje de plomo en sangre, cuando antes se admitían 5 gramos. Tenemos chicos que tienen 10, 8 y 7 gramos en sangre. La Autoridad de la Cuenca Matanza-Riachuelo (ACUMAR) también lo ha detectado con sus propios estudios. Pero no les ha hecho seguimiento a estos chicos”, dijo a La Tecla Ramón Mondragón, integrante del foro. Del informe se desprende que sólo en Villa Lamadrid hay 250 chicos con plomo en sangre.

Y éste no es un tema nuevo. La gestión Insaurralde descuidó esto desde hace años. Entre agosto de 2013 y marzo de 2014 concurrieron al laboratorio móvil de la ACUMAR 1.217 niños menores de 6 años, se realizaron 1.213 determinaciones de plomo y 1.215 de hemoglobina en sangre. 

De los 1.213 casos, 200 presentaron valores superiores a los de referencia, 176 tuvieron valores de entre 5,1 y 9,9 ug/dl (microgramos), y 24 presentaron valores de Pb 10 ug/dl. 

A partir de los datos recolectados se implementaron controles y tratamientos sanitarios, pero desde el foro habían desconocido el trabajo de campo de ACUMAR. 

Ante esto, el secretario de Salud de Lomas de Zamora, Juan Navarro, admitió las problemáticas en la zona y afirmó que presentarán un plan de salud medioambiental junto a la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Social.

Según el funcionario, estas medidas “van a ayudar a seguir reduciendo el nivel de mortalidad infantil y a tener una política de salud ambiental de primer nivel”.

Por su parte, desde el Foro Hídrico sostienen que “el municipio no tiene capacidad operativa para sanear la zona. Provincia abre los proyectos técnicos, el municipio presta el espacio necesario para hacer algún tipo de obra, y Nación la fi-nancia. La Comuna tiene que garantizar que el lugar donde se haga la obra no esté invadido, y esto no lo hace”. Además, el funcionamiento en los centros de atención primaria no es el mejor. 

Mientras el intendente recorre los pasillos televisivos o posa para la tapa de alguna revista, en su distrito las obras de infraestructura son urgentes. No sólo para aliviar las inundaciones y para suministrar un servicio tan vital como el agua, sino también para disminuir y acabar con la contaminación en cientos de niños, que tendrán secuelas irreparables.