La llegada a la montaña fue con el mejor ánimo y hoy toca lo más duro

La llegada a la montaña fue con el mejor ánimo y hoy toca lo más duro

El efusivo abrazo entre el gobernador Sergio Uñac y el diputado nacional Eduardo Cáceres, en la estancia Los Manantiales y a punto de subirse a las mulas, fue uno de los símbolos más fuertes de la camaradería que se vive entre los más de 130 integrantes de la expedición que recrea el paso libertador de San Martín por la cordillera sanjuanina, en su 11ma edición.

En ese clima cordial y sumamente distendido comenzó ayer la travesía a lomo de mula, que por la tarde llegó hasta el puesto de Las Frías, en los cordones montañosos calingastinos.

En ese lugar todos vivieron uno de los momentos más emotivos de la primera jornada en la montaña. Fue cuando arriaron la bandera argentina y la guardaron, en una ceremonia que dejó a todos con la piel erizada. El vicegobernador Marcelo Lima, presente desde la primera edición del Cruce, fue el encargado de cerrar la ceremonia de arrío plegando la insignia junto a la enviada de DIARIO DE CUYO, Mónica Martín.

El buen clima del grupo, así como el buen tiempo que acompañó durante todo el día, fueron un buen resorte para encarar lo mejor posible la dura jornada que les toca hoy: saldrán muy tempranito y cabalgarán el ascenso y descenso de El Espinacito, uno de los cerros más difíciles y peligrosos de todo el trayecto.

Desde la preparación en Calingasta se hizo hincapié en la prudencia, y justamente esos consejos deberán llevar al extremo hoy por lo duro del camino, que culminará en el refugio Sardina. 

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