Ocurrió en la madrugada del domingo, en Tucumán, cuando un hombre de 31 años, identificado como Cesar Daniel Jiménez, quiso impedir que dos ladrones le robaran la moto a su hermano que regresaba de dejar a la novia.

 En medio del forcejeo, uno de los ladrones le disparó a Jiménez en la cabeza. 5 horas más tarde, el hombre moría en el hospital Padilla de la capital provincial.

 Cuando los delincuentes intentaban irse del lugar, un grupo de vecinos que escuchó los disparos, los persiguió y logró reducir al que había disparado.

 En ese momento, según relata el diario La Gaceta, los vecinos y familiares de Jiménez golpearon al delincuente hasta dejarlo moribundo y, horas más tarde, murió también en el Centro de Salud de San Miguel de Tucumán.

 El delincuente muerto fue identificado como Gustavo Daniel Guerrero.

 Fuentes policiales y judiciales comentaron al medio tucumano que Guerrero contaba con antecedentes por robos y por contravenciones. En enero de 2013 había recuperado la libertad, luego de estar detenido acusado de robo de motos.