Lifschitz: "Ahora tenemos una buena relación con Macri"

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El gobernador pidió debatir sobre "el rumbo en materia económica y social de la Argentina".

Tras la reciente firma del pacto fiscal, el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, celebró ayer que haya "un vínculo más directo" con el presidente Mauricio Macri. Pero le reclamó "un debate sobre el rumbo en materia económica y social de la Argentina".

"Ahora tenemos una buena relación. Tal vez nos costó un poco encontrarle la vuelta pero, desde mitad del año pasado, hay un vínculo más directo, sin intermediarios. Le mando mensajes y me contesta al toque", explicó el jefe de la Casa Gris.

El mandatario socialista resaltó que vienen "de una campaña muy dura con el PRO en 2015 y, quizás eso, había dejado resquemores", pero destacó que Macri es el jefe del Estado "que más visitó Santa Fe, como diez veces en los dos años" de gestión.

"(Macri) Se ha ganado con votos el lugar. No me puedo dar el lujo de llevarme mal con el presidente, más allá de las diferencias políticas", precisó Lifschitz.

Si bien el gobernador también elogió la gestión de la Casa Rosada, consideró que "hay datos preocupantes" como "el déficit fiscal alto, el nivel de endeudamiento, el déficit comercial, que hace años no tenía la Argentina, y una inflación y tasas elevadas".

"Creo que se necesita un debate sobre el rumbo en materia económica y social en la Argentina. Coincidimos en reducir la pobreza como dicen, pero no está claro cuál será el camino y las políticas", sostuvo.

Asimismo, el socialista destacó el cambio que significó para Santa Fe contar con un gobierno nacional que abordara al narcotráfico como un problema de las dimensiones que tiene.

"Se empezó a hablar del tema como un problema real de la Argentina y a afrontarlo de esa manera desde el Ministerio de Seguridad nacional, con acciones conjuntas permanentes. Antes se negaba que existiera el narcotráfico", analizó.

Acerca de los últimos comicios, Lifschitz admitió que "Cambiemos logró ganar en Santa Fe la elección a diputado nacional con una lista de absolutos desconocidos, pero es la marca la que tira".

"Sumado a eso, la polarización con el kirchnerismo le resultó funcional a Cambiemos. Si ese esquema se sigue consolidando, se empobrece el debate político y le restamos alternativas a la Argentina", prosiguió el gobernador.

Acerca de cómo asimiló el Frente Progresista (FPCyS ) el haber quedado tercero en Santa Fe, Lifschitz explicó: "No fue sorpresivo, lo veníamos suponiendo. Expresa este fenómeno nuevo".

"No hemos sido capaces de consolidar una alternativa nacional creíble y con vocación de poder, eso también es clave. Con buenas ideas y buena gente, pero sin vocación de poder para lograr sumar políticamente, no hay chances de alcanzar un gobierno a nivel nacional. En 2011 estábamos todos en la línea de largada cuando Hermes Binner sacó el 18 por ciento de los votos, aunque esa carrera evidentemente la ganó Macri", prosiguió, en clave de autocrítica.

Lo que viene

Respecto del rol del progresismo en la Argentina, el socialista señaló: "Hay espacio en el electorado, no es trabajar en el vacío. Existe un sector que está presente, pero que alternativamente busca otras opciones porque no hay una opción progresista a nivel nacional".

"Desde la caída de Raúl Alfonsín, el radicalismo dejó de representar a ese sector y ahora con el PRO dejó vacante ese lugar. En la década del 90 fue el Frente Grande, el Frepaso, después Elisa Carrió, Binner y Margarita Stolbizer. El espacio está, hay que buscar la forma de representarlo", sentenció el mandatario santafesino.

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