La vicegobernadora mendocina Laura Montero fue insultada durante toda la marcha de Ni una menos en Mendoza, realizada en la tarde del miércoles, y terminó cuando intentaron agredirla físicamente cuando estaba en las escaleras del ingreso principal de la Legislatura, donde acompañaba a las familias de víctimas. 

El ataque ocurrió alrededor de las 20.45 cuando un grupo de personas comenzó a insultar a algunas mujeres que estaban allí e incluso a la vicegobernadora. Cuando estos inadaptados tiraron agua la gente se asustó y comenzaron los desmanes.

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"También estaban las legisladoras acompañándome, pero también familiares de víctimas, como de María José Coni y la madre de Julieta González", dijo a Radio NihuilLaura Montero.

"Estas manifestaciones normalmente fueron no violentas porque justamente lo que ponen en el escenario es la lucha contra la no violencia a las mujeres y es por eso que también van a la Legislatura y tratan de expresarse", expresó la vicegobernadora.

Para la marcha del miércoles, Montero había dado la orden que la Casa de las Leyes no estuviera vallada, que tuviera sus puertas abiertas y que haya un micrófono para que familiares de víctimas pudieran expresarse. "Creo que hay que crear esos vínculos con la sociedad, vínculos sanos", dijo.

"La mayoría de la gente lo hizo de manera respetuosa, prudente y además fue a pedir por la no violencia. Pero lamentablemente hubo un grupo que fue violento, que me agredió a mí, a las legisladoras y familiares de víctimas y a la institución en sí. Es una falta de respeto a la Institución que le abre las puertas para que se manifieste de otra manera", sostuvo la vicegobernadora.

Luego del primer episodio que provocó que la Policía actuara y cerrara todos los accesos a la Legislatura, las personas que provocaron el lamentable episodio entraron por un pasillo lateral y rompieron un vidrio del Salón Rojo.

"Ahí siempre están las vallas que son las que ayer sacamos, di la instrucción de no poner vallas porque era una manifestación pacífica, porque a la gente tampoco les gusta que cuando se manifiestan pacíficamente y piden por la no violencia, que uno los reciba en una Legislatura cerrada y vallada", indicó Montero y agregó que es necesario buscar los equilibrios.

Dijo que esto que pasó, lleva a reflexionar que "hay una situación que hay que abordar desde el Estado con una cultura institucional distinta que es la que se está trabajando desde que se sancionó la Ley de violencia de género del 2009. Hay una ley clara que hay que poner en práctica, pero que hay que coordinarla institucionalmente y son procesos en los que estamos avanzando", sostuvo la vicegobernadora.