A las 14 de este martes, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, recibió a un grupo de periodistas en uno de los salones del Palacio Municipal de Bolívar 1. En una mesa rectangular, junto al Jefe de Gobierno se sentaron, el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Martín Ocampo; el jefe de Gabinete, Felipe Miguel y el secretario de Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro.

“Queremos anunciar hoy la creación de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, que surge de la unión de la Policía Metropolitana (PM) y de parte de la Policía Federal (PFA) traspasada a la Capital”, arrancó Larreta para luego agregar: “Esto forma parte del convenio que firmamos el 5 de enero con el Gobierno nacional para hacernos cargo de la seguridad en la Ciudad”.

El Jefe de Gobierno dio detalles del trabajo realizado luego de la firma del convenio. “En estos primeros seis meses trabajamos en el tema del traspaso. Logrando que 18.400 efectivos de la Federal pasaran a la Ciudad. De acá al 31 de diciembre pasarán otros 1.100 uniformados. Al mismo tiempo realizamos la transferencia de importantes inmuebles de la policía”.

Para Larreta, los primeros seis meses estuvieron dedicados “al traspaso del personal”, la segunda etapa, que abarcará de acá a fin de año, estará dedicada a la “unificación” de los efectivos traspasados con los integrantes de la Metropolitana.

Pero el Jefe de Gobierno se reservaba una noticia muy importante. “A fin de esta semana, para más datos el viernes, enviaremos a la Legislatura la Ley Integral de Seguridad Pública”, anunció Rodríguez larreta.

“Una vez que se apruebe esta ley, empezará funcionar la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, Creemos que eso se concretará el 1 de enero”, agregó.

Enseguida fue el turno de Ocampo, quien destacó que el proyecto de ley que se enviará a la Legislatura “incluye a la policía” pero va más allá, ya que es “un sistema integral de seguridad”.

Uno de los datos novedosos que contiene la nueva ley es que la Dirección de Asuntos Internos ya no será manejada por los propios policías. “Tendrá otro nombre, se llamará Oficina de Transparencia y será manejada por civiles”, explicó Ocampo.

Otro dato importantes es que el nombre del jefe de la Policía de la Ciudad aún no está definido. A pesar de que el jefe de la Superintendencia de Seguridad Metropolitana de la Federal, el comisario Néstor Calviño, es mencionado como jefe de la policía traspasada, tanto Larreta como Ocampo manifestaron que aún no se decidió quien manejará la nueva fuerza.

Esa decisión dependerá del Jefe de Gobierno porteño y por eso mismo se dejó abierta la posibilidad de que pueda ser un civil el que lidere la fuerza.

El tema del nuevo escalafón que tendrá la fuerza es algo que todavía se está debatiendo. “La idea incluida en el proyecto que enviamos a la Legislatura es que haya un solo escalafón de oficiales”, adelantó Ocampo.

El Plan Integral de Seguridad no solo le dará un marco jurídico a la policía, sino que también incluirá al personal de las agencias de seguridad privada y a los agentes de tránsito.

Los cuatros ejes en los que están divido el plan son: el gobierno civil, la transparencia, la participación ciudadana y la capacitación profesional.

El Plan Integral de Seguridad consta de más de 500 artículos y una vez que ingrese a la Legislatura deberá pasar por las comisiones de Seguridad y Justicia. Ocampo adelantó que para su aprobación se necesitarán 31 votos, con lo cual el Pro confía en que será aprobado, ya que solo necesita sumar tres legisladores de la oposición a los 28 propios.

El Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP) de la PM, que se encuentra en el Bajo Flores será el lugar donde se capaciten los nuevos policías. “Los traspasados ya se está realizando cursos en el Instituto”, señaló Ocampo.

“La idea es que el policía trabaje de policía y que las tareas administrativas las realicen civiles, de esa manera volveremos a capacitar a los policías de la Federal que venían realizando tareas administrativas para así sumarlos al trabajo de calle”, explicó el ministro de Justicia.

Los sueldos también se modificarán ya que se adecuarán al nuevo escalafón. Lo mismo que las horas de trabajo, los integrantes de la Federal trabajan seis horas, los nuevos policías trabajarán ocho y se redefinirá el concepto de adicionales.

Una vez completado el traspaso, la Policía de la Ciudad tendrá 25 mil efectivos. Los grupos especiales que forman parte de la PM se fusionarán en la nueva fuerza y sus tareas serán, en algunos casos redefinidas.

“Estamos haciendo una revolución, algo que nunca se hizo por eso hay ruido”, aseguró Ocampo al referirse al abucheo y los insultos que recibió Calviño, la semana pasada, por parte de efectivos de la Federal incluidos en el traspaso.

Ocampo agregó otra definición política que dejó en claro el objetivo que tiene el nuevo plan de seguridad que impulsa el Gobierno porteño. “Antes el poder político delegaba el manejo de la seguridad en la policía. Ahora las políticas de seguridad las va a decidir el Gobierno de la Ciudad”, aseveró.

La presentación oficial de la Policía de la Ciudad, el color de los uniformes y los patrulleros, y el nuevo escudo serán presentados el miércoles a las 10.30 en el Instituto de la PM, ubicado en la calle Santiago de Compostela 3801.