No hay una evidencia científica más que la aritmética misma que pueda sentenciar que la apertura de la cuarentena en la Ciudad de Buenos Aires ya impactó en la suba de casos de infectados por coronavirus que, para Horacio Rodríguez Larreta se multiplicaron por 6 o para Diego Santilli, por 5, lo que da lo mismo en el parámetro de la gravedad. Para el Gobierno porteño, sin embargo, las causas de la situación crítica en la que se encuentra el distrito serían el comportamiento propio de la pandemia, que anuncia su pico para esta semana o la próxima. Así, el jefe de Gobierno y su equipo esperan los datos de esta semana para asociarlos como consecuencia de la mayor cantidad de circulación de personas en función de la habilitación de miles de comercios minoristas. Mientras, comienza otra curva, la del retroceso en esa flexibilización, que se evaluará cuando finalice la nueva etapa del aislamiento impuesto hasta el 7 de junio. Ayer fue un día de algo de alivio, porque los casos registrados de infectados en el país fueron 552 y en la Ciudad, 375, que si bien es un número alto y que representa más de la mitad de los casos de la Argentina en la jornada, es el más bajo en cuatro días a nivel local, que el domingo sumó 461 infectados, la mayor cantidad en territorio porteño desde que comenzó la pandemia,

Hoy el Gobierno porteño pondrá en marcha a pleno el plan que presentó el domingo, que incluye el cierre de unos 13 mil negocios con atención al público que se encuentran en zonas de centros comerciales y estaciones de trasbordo (como Constitución, Retiro o el Once) a los que permitió abrir a partir del 12 y del 14 de mayo pasado, cuando dispuso la cuarentena “light”. Además será más estricto el control de ingreso a la Ciudad y habrá un refuerzo .

Informate másCoronavirus: Gobierno porteño dará detalles de la situación sanitaria en la Ciudad

Agrava la situación del AMBA, con la detección de contagios en la Villa Azul del conurbano y ahora la idea es restringir al máximo la circulación entre los distritos, un objetivo que será más fuerte a partir del viernes, cuando comiencen a funcionar los nuevos permisos para trasladarse entre jurisdicciones en transporte público, más limitado a trabajadores de actividades esenciales.

Para Larreta será otra prueba en el peor momento de la pandemia que marca un epicentro trágico en el territorio porteño y el conurbano bonaerense.

A la tensión se sumó ayer una rara marcha anticuarentena en la Plaza de Mayo (ver aparte) que rompió las reglas del aislamiento sin ningún tipo de control. Es otra cara de lo que deberá controlar el Gobierno porteño para amortiguar el avance de la pandemia con aglomeraciones también de gente en las calles barriales simplemente por la fatiga de la cuarentena o reclamos por el trabajo interrumpido que frena ingresos.

Ayer, Larreta, encabezó el acto de izamiento de la bandera que se realizó en Plaza de Mayo para conmemorar el Día de la Patria, junto a Santilli y el secretario general y de Relaciones Internacionales, Fernando Straface. Tras el acto porteño, el jefe de Gobierno manifestó su “fuerte preocupación” al explicar que “en los últimos 15 días los casos se multiplicaron por seis si tomamos los datos de ayer” y dijo que”no sabe” si ya se está atravesando el pico”, pero que estima que los casos”van a seguir creciendo” en los próximos días. En otro sentido, Santilli explicó que en relación con el “pico”, el foco está puesto dentro de tres semanas pero “hay que ver qué pico va a ser”. Además el funcionario aseguró que el Gobierno porteño está buscando una solución para las pymes: ”Siete de cada diez empleos de la Ciudad lo generan las pymes”, sostuvo.