La relación del jefe porteño con la administración nacional provoca cada día una foto nueva, sin duda tranquilizadora en tiempos de epidemia, pero nunca imaginada. La fortaleza de la sintonía para amortiguar el avance del virus proyecta que, si se da la victoria compartida, algo habrá cambiado en la política criolla. Para más, Horacio Rodríguez Larreta transita por el distrito más castigado por ahora con la enfermedad, ante un vecino -el conurbano bonaerense- que preocupa, en términos sanitarios, por su diversidad y particularidades.

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Como sea, ayer el jefe de Gobierno incursionó junto a funcionarios nacionales, en otra toma acerca del trabajo compartido y la sintonía, que mientras lo lleva a reforzar los recursos para poner a punto el sistema de salud estatal en su geografía, algo clave en la batalla contra el coronavirus, que le impone (por decisión propia inclusive) coordinar con destreza cada paso con la administración nacional.

Se mostró Larreta junto a Wado de Pedro, por un lado, y junto a Ginés González García por otro.

Con el ministro del Interior y el vicejefe de Gobierno y ministro de Justicia y Seguridad, Diego Santilli, recorrió el Centro de Monitoreo Urbano de Villa Martelli, una localidad bonaerense que linda, como la Capital, con la General Paz. De la recorrida también participó la titular de la Dirección Nacional de Migraciones, Florencia Carignano.

En ese Centro se supervisan los controles que se están intensificando en los accesos a la Ciudad de Buenos Aires a partir del cierre de pasos, con la intención de conseguir un pleno acatamiento de la cuarentena obligatoria. Ese aislamiento resulta clave, por lo cual Larreta insistió con que cada persona que entra “y que no corresponde, es un riesgo para ella, para su familia y para los vecinos de la Ciudad y la Provincia”. Los datos que se reportan en ese lugar son clave para el control. Los números los dio el ministro del Interior y aseguró que 50 mil vehículos registrados en Capital tienen prohibición de circular.

“Tenemos 490 lectoras de patentes alrededor de toda la General Paz y los cruces del Riachuelo, todas están puestas en función de los datos que nos pasa Migraciones de la gente que entró en los últimos 15 días, y estamos siendo muy estrictos con los controles”, explicó el jefe porteño.

Desde ayer se cruzan los datos de las patentes de todos los vehículos que ingresaron al país en las últimas semanas.

El Gobierno porteño ayer, abrió carriles exclusivos para el tránsito de los afectados al sistema de Salud y de productos esenciales.

Wado de Pedro explicó que la “lista de 195 mil personas (que vinieron del exterior) fue cruzada en la Dirección Nacional del Automotor, se cruzaron todas las patentes de la Argentina y hoy tenemos un listado de aproximadamente 200 mil autos que tienen prohibición de circular. De los 200 mil autos 50 mil son de la Ciudad de Buenos Aires”.

Carignano sumó que el miércoles “ a nivel país ingresaron aproximadamente 3.700 personas, de las cuales 1.700 fueron solamente de Ezeiza” y comparó que “antes del 13 de marzo, que fue cuando se decretó la emergencia sanitaria, estábamos recibiendo en Ezeiza solamente 33.000 personas”.

Por otra parte, Ginés González García, se reunió con Larreta, en la sala de situación del Ministerio de Salud de la Nación, en el octavo piso. Es un salón especialmente diseñado para seguir , en todo el país y en el mundo, cómo evoluciona el coronavirus. “Monitorea además una mesa conformada por expertos y trabaja de manera articulada con otras áreas y organismos sanitarios”, explicaron desde el Gobierno porteño. En ese lugar se analiza y evalúa permanentemente la información generada en los diferentes sectores y niveles del sistema sanitario para luego unificarla y presentarla en diversos formatos como tablas, gráficos, mapas, documentos técnicos o informes estratégicos.