El único gol del encuentro, fue convertido a los 29 minutos del primer tiempo por Gustavo Balvorín.

Como saldo negativo, fue otra vez el bochornoso enfrentamiento entre sus propios hinchas identificados como la Número Uno y la Leal, quienes se agredieron de distintas formas antes, durante y después del partido, tanto en el estadio, como en las afueras del mismo, e incluso en la ruta.

También se produjeron incidentes por parte de los hinchas “merengues” que ingresaron al campo de juego para agredir a los jugadores del Santo, ante la pasividad de la policía jujeña.

Respecto al partido, Juventud no tuvo un buen inicio, ya que el local salió a buscar su primera victoria en el torneo y presentó un esquema que le trajo algunas dificultades al equipo Santo, que recién pudo hacer pie al promediar la etapa.

Cuando se jugaban 29 minutos de la primera etapa, llegó el único gol del encuentro: Gustavo Balvorín, de cabeza, ponía en ventaja al antoniano.

A partir de allí, Zapla parecía desmoronarse y estaba para el cachetazo, aunque el Santo desaprovechó sus oportunidades para ampliar la ventaja y llegó el cierre de la primera etapa.

En el complemanto, otra vez apareció Zapla, con más ímpetu que ideas para llegar al gol, pero el Santo, si bien cedió la pelota, supo cuidar el resultado, aunque debió liquidarlo en las oportunidades que tuvo para no terminar sufriendo en el cierre del partido.

Fue victoria del Santo, que ahora mira a todos desde arriba en su Grupo, pero debe mejorar su puntería en la definición, para no terminar sufriendo en los tramos finales.

Llegó el final del partido y fue el turno para la hinchada local en generar incidentes al ingresar al campo para agredir a los jugadores Santos. Antes, un hincha que ingresó al campo durante el encuentro le quitó a Cárdenas el balón para tirarlo a la tribuna. Un verdadero bochorno.