Durante la actividad de recolección de residuos, los voluntarios encontraron colillas de cigarrillo, tapitas de plástico, sorbetes, un viejo televisor, partes de una cocina, colchones y una heladera, entre otros materiales desechados. Estos datos son poco sorprendentes teniendo en cuenta que en nuestro país cada habitante genera aproximadamente un kilo de desechos por día, provocando 12.325.000 toneladas de basura por año. Cada objeto fue registrado y clasificado en planillas que se utilizaron para el Censo de residuos que llevó a cabo el Departamento de Educación Ambiental.

La jornada se realizó como cierre de la primera edición de la campaña “Playas Limpias” desarrollada por Fundación Mundo Marino en el verano. Durante la acción, los trabajadores ayudaron a concientizar a los turistas acerca de las consecuencias negativas que provoca arrojar basura en la playa para la fauna marina. Los residuos, el petróleo, las sogas y los restos de redes que llegan al mar afectan a los animales porque los confunden con su alimento o porque les quedan atascados en sus extremidades, y  muchas veces les ocasionan la muerte. Esta problemática se evidencia año tras año con los casos de tortugas y lobos marinos que ingresan al Centro de Rescate y Rehabilitación de la Fundación, para ser atendidos tras haber sufrido lastimaduras o patologías a causa de los desechos.

De este modo, cada voluntario de Mundo Marino y su Fundación reafirmó su profundo compromiso con el entorno y la naturaleza, en pos de la conservación y el cuidado del medio ambiente, reforzando su labor de concientizar sobre la importancia de cambiar los hábitos que afectan la biodiversidad de nuestro planeta.

Acerca de Mundo Marino y Fundación Mundo Marino

Mundo Marino y la Fundación Mundo Marino son organizaciones que luchan contra la devastación de los mares hace más de 37 años. Su misión es proteger a los animales y al medio ambiente, y ayudar a construir una sociedad más responsable con el planeta. Esa convicción se ha defendido desde entonces trabajando tres ejes: protegiendo a los animales, concientizando a la sociedad y generando un ámbito de trabajo para los amantes de los animales.

Si bien esta tarea la comenzó en soledad Don David Méndez en el año 1979, la siguieron sus hijos y hoy la continúan sus nietos en conjunto con un equipo de apasionados por la naturaleza.