El Gobierno marcó su posición ante la manifestación en el Congreso de las organizaciones sociales y la CGT unificada. Aunque en la Casa Rosada se cuestionó la protesta y el proyecto de ley que busca declarar la emergencia social, no dejaron de tenderle la mano a los sectores que hoy saldrán a la calle y con los que hay continuas reuniones.

El vocero oficial esta mañana fue el ministro de Trabajo, Jorge Triaca. "Muchos de los que avalaron esta ley se fueron del gobierno sin reconocer la pobreza", dijo el funcionario en radio Mitre.

Apuntó contra las intenciones políticas que hay detrás de la iniciativa legislativa, que ya tiene media sanción en el Senado pero que Cambiemos esperar frenar en Diputados. Pese a las críticas, Triaca aseguró: "Más allá de la manifestación de hoy, la agenda de trabajo va a seguir adelante".

El Gobierno rechaza la iniciativa que propone un aumento de emergencia del 15% en las asignaciones por hijo y por embarazo, y la creación de un millón de empleos formales mediante la reconversión de planes sociales. Aseguran que la ley, en caso de aplicarse, provocaría un agujero fiscal de más de 100.000 millones de pesos anuales.

Impulsada por el denominado triunvirato piquetero -Barrios de Pie, la Confederación de Trabajadores de la Economía Social (CTEP) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC)-, el proyecto de norma fue votada en la Cámara alta por los senadores opositores, principalmente pro el bloque del Frente para la Victoria-PJ.

"Este Gobierno va a buscar soluciones para todos los sectores", prometió Triaca. Aunque no ofreció detalles, se estima que la semana que viene volvería a concretarse la mesa tripartita entre el Gobierno, los sindicatos y los empresarios.

En paralelo, las agrupaciones sociales harán lo propio con el Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Carolina Stanley. En ese sentido, Triaca destacó: "Tenemos una propuesta de desarrollo para el sector de la economía popular. Hemos dado contención social y queremos poner en marcha nuestra economíay generar empleos".