Señaló a APP que las autoridades nacionales “están perplejos, porque por un lado se dijo una cosa y se terminó haciendo otra, explicitando que en realidad el gobernador Alberto Weretilneck informó al poder central que pretendía congelar el tema hasta después de octubre, dejaba una puerta abierta, pero “mientras decía esto ya había redactado la nota y había grabado el video” comunicando que se desautorizaba el emprendimiento. “No fue serio”, sentenció.

Afirmó que el mandatario comete un error al considerar que de esta manera “capitaliza votos”, y además lo hace rompiendo lazos con Nación en momentos en que necesita una relación institucional responsable.

Iribarren descalificó la intención de cerrar por una ley la construcción de una planta nuclear en la provincia y sobre todo originada en un resultado electoral. Ironizó que “yo creía que estábamos eligiendo un diputado nacional, en ningún lado se dijo que era una consulta popular por el sí o no a la central nuclear, no siendo que yo me haya perdido esa película”.

Iribarren expresó a APP que por este tema “hay quienes dicen que sí y quienes dicen que no”, y si verdaderamente se quiere mayor claridad “hay que trabajar en una consulta popular”.

Informó que esto que dice está respaldado por la constitución provincial y la carta orgánica municipal, por eso remitió tanto al gobernador Alberto Weretilneck como a la Legislatura provincial que se suspenda el tratamiento de esta ley en contra de la construcción de la central en función que se pretende realizar una consulta popular en Sierra Grande por este tema después de los comicios de octubre.

Dijo que ya remitió un proyecto de ordenanza al Concejo Deliberante para que se apruebe esta convocatoria, y se propone realizar el plebiscito después de los comicios de octubre para que precisamente “no se tiña de cuestiones electorales y demagógicas”.

Afirmó a APP que no tiene dudas que hoy lo que sucede respecto a este tema “es tribunero, lo que están haciendo es tratar de capitalizar electoralmente a los que dijeron que no a la central, para llevar agua para su molino, aunque sin darse cuenta que suman por un lado pero restan por el otro con los que sí estamos de acuerdo”.

“Además es desprolijo lo que se está haciendo, se espanta a los que quieren venir a invertir a la provincia, no hay seguridad jurídica ni política”, aseveró.

Enfatizó que “hay que tratar estos temas con mayor seriedad”, subrayando que primero generaron expectativa y una gran esperanza acá en Sierra Grande “y después nos sacan la zanahoria e incluso se ofenden, dicen que se sienten amenazados por la Nación, es ridículo”.