El lunes Mariano Bruera, hermano del ex intendente de La Plata, Pablo Bruera, y cinco ex funcionarios de la ex gestión municipal, deberán presentarse a declarar ante el fiscal Marcelo Romero en el marco de la imputación por malversación de caudales públicos y violación de deberes de funcionario. La denuncia fue presentada por el actual secretario Legal y Técnica del municipio, Darío Ganduglia.

Desde que Julio Garro asumió la jefatura comunal, la gestión empezó a llevar adelante una auditoria sobre el gobierno de Bruera que manejó el ejecutivo local desde el año 2007 al 2015. En este marco, el fiscal Romero tomó actuación de una de las denuncias y avanzó en la investigación.

Además de Mariano Bruera también fueron imputados los ex concejales Gabriel Céspedes y Cristian Vicent; Javier Nohaczewski (antiguo delegado de la localidad de Tolosa); Patricio Yalet y Cristian Pérez (referente de la agrupación Renovación y Militancia).

La investigación apunta a dos cuestiones. Por un lado la utilización de maquinarias municipales para fines particulares. Esto es el uso de camiones, retroexcavadoras y retropalas para otros usos más allá de la gestión.  Por el otro lado, Romero también puso la atención en diferentes indicios que permiten establecer que desde febrero del 2014 hasta  fines de noviembre de 2015, en un depósito municipal ubicado en la localidad de Los Hornos se compactaban vehículos oficiales sin documentación alguna ni autorización de la dirección de Vehículos Oficiales de la Municipalidad de La Plata.

En los primeros meses de la gestión de Julio Garro, el actual intendente denunció el faltante de los vehículos oficiales. Puntalmente el jefe comunal había estimado la desaparición de 76 unidades móviles. Luego de los primeros avances de la justicia se determinó que de ese total 56 habían pasado a desguace de forma ilegal, mientras que restaba conocer el paradero de 16 vehículos. Los cuatro restantes habían aparecido de manera “espontanea”. Por alguna razón poco clara estaban en manos de particulares.