Los intendentes bonaerenses del PJ, cada vez más cerca de Cristina Kirchner

Los intendentes bonaerenses del PJ, cada vez más cerca de Cristina Kirchner

Tienen diálogo muy frecuente con Máximo e impulsaron la llegada de una ultra K a la Defensoría.

 

¿Es Cristina el salvavidas electoral de los intendentes peronistas del Conurbano?. A juzgar por los últimos movimientos de los jefes territoriales partidarios la ex presidenta, por ahora, resulta el mejor “flota –flota” hasta que se armen los botes de salvataje antes de agosto 2019 con las PASO.

Comprobante a la vista: diálogo permanente de los alcaldes con Máximo Kirchner; visitas asiduas al Instituto Patria; asistencia perfecta al acto que realizó hace pocos días el ex ministro de Defensa, Agustín Rossi, en el Partido de la Costa y reciente designación en el staff de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, de la ex presidenta del bloque FpV de Diputados, Juliana Di Tulio.

La ex legisladora representa el espacio más concentrado del cristinismo. Su contrato es partir del 1 de setiembre. No se agota en el trámite administrativo. Confirma el inicio de un adelantamiento de los tiempos políticos en Buenos Aires, con miras al comicio presidencial del año próximo. Como fue asumido, en su momento, las autoridades de la Defensoría –con el titular Guido Lorenzino a la cabeza- se habían constituido después que los jefes comunales auxiliaran a María Eugenia Vidal con la aprobación del Presupuesto, al inicio de su gestión.

En ese plano de no agresión transcurrieron un par de períodos, hasta la actualidad cuando la representación institucional de los alcaldes y el PJ orgánico bonaerense deciden confrontar a campo abierto con la administración macrista. La secuencia última es con los intendentes agrupados en la FAM, que preside Verónica Magario (La Matanza), exigiendo la reinstalación del Fondo Sojero frente a la Casa Rosada, con pedido de audiencia a Mauricio Macri, incluida. Después, ante los ministros Santiago López Medrano (Desarrollo Social) y Joaquín De La Torre (Gobierno) para declarar la emergencia alimentaria, sanitaria , de salud y seguridad en la Provincia. El martes, en Ituzaingó, ellos mismo declararon la emergencia en sus respectivos distritos. Y anuncian nuevas iniciativas. En simultáneo, se conoce el desembarco de Di Tulio.

¿Qué incidencia inmediata tiene esta rigidización del sistema oficialismo –oposición?. El viernes, se conocerá el anteproyecto de Presupuesto nacional. Allí quedará establecido que nivel de ajuste debe operar Vidal en la Provincia. Se especula con 25.000 millones de poda en los gastos de partidas previstas. Un par de semanas después, el borrador del cálculo de gastos e ingresos del estado bonaerense debería someterse a consideración parlamentaria. En previsión del eventual comportamiento refractario del kirchnerismo y los representantes legislativos de los intendentes, Vidal intentaría reeditar acercamiento con el Frente Renovador de Sergio Massa. Alguna reunión reservada en CapItal Federal y varios llamados entre ambas orillas confirmarían esta orientación.

Se sabe, Massa no convalidará, en ningún caso, un espacio común con Cristina. La quiere fuera de circulación, como varios gobernadores peronistas, entre ellos Juan Manuel Urtubey (Salta) y y Juan Schiaretti (Córdoba). En Buenos Aires, Massa intenta un gambito electoral para cerrar caminos a Cristina y obligar a los intendentes a jugar en un esquema fuera de la órbita de la ex presiente. Propone el desdoblamiento de las elecciones municipales de la provincial y nacional. De esa manera, los jefes comunales no podrían disponer del nombre de Cristina al tope de las boletas para traccionar votos. No tendrá éxito. El macrismo tampoco quiere variaciones de ese tipo. Pero, entre los saldos de temporada, Vidal guarda contraprestaciones para quienes respalden alguna de sus medidas. La más importante es Presupuesto 2019. Hay dos lugares en el directorio del Banco Provincia y otros dos en el Tribunal de Cuentas que esperan designación, y están reservados para opositores amigables.

Cargos versus encuestas. Los intendentes están persuadidos sobre las mediciones que tiene Cristina. Esteban Gray (Esteban Echeverría), Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Gabriel Katopodis (San Martín) y Juan Zabaleta (Hurlingham), son los gestores del acercamiento. En algunos de esos encuentros, Cristina gestionó con Insaurralde un lugar para Di Tulio, quien se había quedado afuera de la nóminas legislativas de Unidad Ciudadana 2017. Hasta entonces, había presidido el bloque K de Diputados. Insaurralde tramitó también la designación de Lorenzino.

No obstante, el alcalde lomense no rompe todos los puentes con la Gobernación. Y, de acuerdo con presunciones domésticas de la Legislatura, con los otros intendentes no resignará sus movimientos- durante la discusión del Presupuesto- al rol exclusivo de confrontación directa que propone el kirchnerismo. La pugna es con Magario, de comportamiento más cerrado. Claro está, en ese esquema sin retorno la alcaldesa se ubica como postulante a la Gobernación.

Mientras, la pelea es con comunicados. En Ituzaingó, cuando declararon la emergencia social, los intendentes cuestionaron a Vidal por “falta de diálogo y de medidas para mejorar la situación” en los distritos. El miércoles a la noche, la gobernadora respondió que “en momentos donde hay problemas más que declarar hay que hacer”. “Las declaraciones no cambian nada. En las respuestas concretas me van a encontrar siempre. No para la foto. Para las acciones concretas sí como me he reunido con muchos de ellos y no lo pueden desmentir porque fue públicamente”, insistió Vidal.

Comentá la nota