El 42,7 por ciento de los habitantes de Mar del Plata-Batán considera que la inseguridad y la delincuencia son los problemas más graves que se viven, mientras que la falta de trabajo preocupa al 23,3 por ciento. Ante la pregunta personal sobre el problema que más preocupa, los bajos salarios trepan al 18 por ciento y la inflación y la suba de precios al 14 por ciento, apenas superando por un punto a la falta de trabajo.

Al referirse a sus barrios, los encuestados vuelven a posicionar a la inseguridad, con el 46,1 por ciento en el primer lugar, mientras que las calles rotas llegan al 23,6% opiniones. Tales datos surgen de una encuesta realizada por la Consultora Marea Estrategia & Marketing, entre el 31 de agosto y el 2 de septiembre pasado -antes del paro de ocho días de los trabajadores municipales- sobre 439 casos bajo la coordinación de Augusto Bianchino, coordinador del equipo de investigación. Consultora Marea surge a mediados de 2013 como un proyecto de estudiantes avanzados de la carrera de Licenciatura en Sociología, se indicó, estableciéndose que el equipo de trabajo realiza mediciones de opinión pública y diversos tipos de relevamientos y análisis socioeconómicos de Mar del Plata y Batán.

Problemáticas de los vecinos

El ranking en problemas del Municipio lo lidera la inseguridad, cuestión que se encuentra en los últimos años como la principal preocupación de los vecinos de Mar del Plata y Batán. No obstante, al referirse a su vida cotidiana los consultados enfatizan su preocupación por las cuestiones socioeconómicas, (45% falta de trabajo, bajos salarios, inflación). “Si bien no puede establecerse un orden de prioridad entre qué problemas (los personales o los del municipio) revisten mayor importancia, sí se observa que las preocupaciones de orden personal se centran en cuestiones económicas, hecho este que no se presentaba como en relevamientos anteriores al consultar a los vecinos por sus problemática y preocupaciones”, indicaron los responsables del muestreo.

Cuando se pregunta por la problemática principal del barrio en que vive el entrevistado, la inseguridad aparece como la principal preocupación alcanzando un 46%. La segunda problemática que aparece con mayor frecuencia entre las respuestas de los entrevistados es el mal estado de las calles. El 23,6% de los vecinos consideran que este es un problema de su barrio.

Cercanía con espacios políticos

Al analizar qué tan cercanos se sienten los habitantes de General Pueyrredon a los distintos partidos políticos se destaca por sobre todo un porcentaje muy elevado de desinterés por la participación política.

El 50% de los marplatenses no se siente convocado por ningún partido político, un 20% se siente cercano al kirchnerismo que surge como la identidad política más convocante en especial dentro de los estratos socioeconómicos considerados como “zonas críticas” de la ciudad. La penetración del PRO concentrada en la zona céntrica de la ciudad y del Frente Renovador queda sustancialmente reducida sumando entre ambas a un 14%.

De aquellos votantes del Pro para presidente en el año 2015, un 50% actualmente no simpatiza con ningún partido político y solo conserva un núcleo duro que hoy lo vuelve a elegir de un 28,5%. De aquellos votantes del Frente para la Victoria para presidente en el año 2015, un 42% actualmente no simpatiza con ningún partido político. Sin embargo el FPV consolida hoy un núcleo duro de un 40 % que lo sigue eligiendo.

En tanto, en el capítulo dedicado al rol de la oposición, el 52% asegura que “al gobierno de Macri le ponen palos en la rueda para gobernar”, considerando el 88% que la oposición debe “acompañar y dialogar”.

Percepción sobre la situación económica

Mientras que más de la mitad de los marplatenses perciben su situación económica personal como positiva, al ser consultados por la situación del país y la ciudad, alrededor del 80% de los vecinos perciben en forma negativa la situación económica actual de Mar del Plata y Batán.

Cuando se consulta a los marplatenses por su percepción sobre el futuro, la evaluación sobre su situación personal se mantiene positiva, superando el 60% las apreciaciones sobre el mejoramiento de la situación económica personal hacia futuro. Con respecto a la situación económica actual de la Argentina se registran apreciaciones positivas y negativas similares, alrededor del 45% en cada caso. Este dato mantiene relación con los sentimientos que despierta el futuro del país: hay un 34,4% que siente esperanza mientras que otro 34,7% siente incertidumbre.

En el caso de las percepciones sobre el futuro económico de la ciudad el balance presenta un saldo negativo respecto a las expectativas económicas, el 49% de los vecinos tiene una percepción pesimista sobre el futuro.

La percepción del futuro se encuentra en relación con la evaluación del Gobierno Nacional: quienes lo desaprueban tienen percepciones pesimistas, mientras que entre los aprobadores predomina el optimismo. Del mismo modo sucede con la percepción de la efectividad a futuro de las políticas económicas del gobierno nacional. Aquellos que aprueban al gobierno confían en sus políticas mientras que los desaprobadores son más escépticos. Sin embargo, en términos generales, más del 55% considera que las medidas del gobierno provocarán “una crisis económica y recesión en el país”.

Por otro lado, pero con la misma tendencia, se perciben las medidas económicas como “un ajuste del gobierno que podría haberse evitado”. Esta evaluación aumenta en detrimento del “discurso instalado por el Gobierno que justifica sus medidas como consecuencia de la herencia del gobierno anterior”, se indicó. Esto último es corroborado al observar que más del 60% de los encuestados atribuyen responsabilidad por las medidas de ajuste a las nuevas políticas económicas del gobierno de Macri, mientras que poco más del 30% sostiene que son medidas necesarias por las consecuencias del gobierno anterior.

“Puede concluirse respecto de la percepción de la situación económica dos grandes lineamientos. Por un lado, si bien la situación económica actual es percibida en forma negativa, las expectativas a futuro son optimistas, salvo en el caso de las expectativas para la ciudad que se mantienen negativas”. Por otro lado, el dispositivo discursivo en torno a los significantes simbólicos de la “pesada herencia” pierde efecto dando lugar a una evaluación económica que guarda relación ya no con el gobierno de Cristina Fernández sino con el actual gobierno de Mauricio Macri, se alegó.

Corrupción

Los responsables de la encuesta llegaron a la conclusión de que el Gobierno del presidente Mauricio Macri, no ha podido consolidar discursivamente a la corrupción como un problema ajeno a su gestión. De hecho solo un 14% percibe que ha disminuido, mientras que el resto entiende que se mantiene igual o incluso que ha aumentado (36,4%). Las respuestas de los encuestados sobre la corrupción no presentan diferencias significativas entre los diferentes estratos socioeconómicos ni tampoco guardan relación directa con la imagen que tienen del gobierno actual o del anterior. Debe consignarse que el 57,3% de los encuestados califica como “muy alto” el nivel de corrupción en la sociedad argentina en general, y el 35,1% como “alto”. En otro item, el 47,3% sostiene que la principal causa de la corrupción es “la posibilidad de hacer abuso del poder” y el 30,9% se4 refirió al “mal funcionamiento de la Justicia”.

Se midió también el efecto de los “tarifazos”· en los servicios públicos. En este sentido, se observa una aceptación general en torno a la idea de que es necesario revisar los precios para los usuarios, pero no conciben la idea que ello conlleve un esfuerzo personal para afrontar el aumento. En definitiva, la mayoría de las personas -más del 63%- creen que aumentar las tarifas no está mal, pero consideran un despropósito un aumento de las características planteadas por el gobierno nacional. Al respecto, el 65% de los consultados está de acuerdo en los “cacerolazos” y “ruidazos” para impedir este aumento. El 68% de los encuestados considera que el “tarifazo” provocó un consumo más racional.

También se preguntó que cree que hubiera hecho Daniel Scioli con las tarifas sin ganaba las elecciones. El 42,8% sostuvo que “las hubiese aumentado pero gradualmente”, el 29,3% que “no las hubiese aumentado” y el 9% “lo hubiese hecho de una sola vez”.