No es ningún secreto que a los Cavs les encantaría llevar a LeBron James de vuelta a casa, pero el Heat no pierda la esperanza no sólo de reunir a su "Big Three" sino también de reforzar el elenco de apoyo a su alrededor para hacer otra carrera hacia el título.

A la medianoche comienzan las negociaciones con los agentes libres de la NBA y se esperan momentos más tensos que nunca. El "Big Three" James-Wade-Bosh que llevó a Miami Heat a cuatro finales consecutivas está disponible y muchos querrán contar con alguno de ellos.

Carmelo Anthony, Dirk Nowitzki y Paul Pierce le añaden seriedad a la clase de agentes libres de este año junto a los recién llegados como Eric Bledsoe, Lance Stephenson, Kyle Lowry y Gordon Hayward.

Por supuesto, el dinero es quien finalmente determinará qué equipo tendrá a los mejores jugadores. Solamente Los Spurs han dominado el arte de la creación de equipos con sus tres piezas fundamentales teniendo menos dinero y jugando en un sistema que limita sus estadísticas personales. Pero eso es mucho más fácil de aspirar que de realmente lograr.

En un juego en el que una estrella puede tener un gran impacto en las fortunas de una franquicia, la mayoría de los equipos con flexibilidad financiera irán tras ellos.

Los Houston Rockets han aterrizado grandes jugadores de cada uno de los dos últimos veranos, pero inclusoJames Harden y Dwight Howard no son suficientes. El gerente general Daryl Morey quiere más estrellas para poner a los Rockets en la parte superior de los poderosos de la Conferencia Oeste, y parece que está dispuesto a pagar un alto precio para hacerlo.

Los Chicago Bulls deberían hacer regresar a Derrick Rose después de dos temporadas descarrilado por lesiones en la rodilla. Pero se espera que salgan al mercado en busca de nombres más grandes disponibles con la esperanza de conseguir más ofensiva en el equipo. La mala noticia es que Los Pacers de Indiana han sido claro que quieren Stephenson de vuelta.

Los Phoenix Suns fueron una de las historias para sentirse bien el año pasado: un equipo joven con química, cohesión y exuberancia que logró 48 victorias. Pero GM Ryan McDonough sabe que la mejor manera de acelerar el resurgimiento en el desierto es agregar un jugador de grandes características para facilitar las cosas a Goran Dragic, Bledsoe (agente libre restringido) y el resto de un núcleo prometedor.

Y, por supuesto, están Los Angeles Lakers, una franquicia que se enorgullece de traer grandes nombres para jugar en las luces. La última vez que fueron grandes - negociando a Dwight Howard hace dos años - no funcionó bien. Ahora ellos están armados con millones en espacio salarial y GM Mitch Kupchak ha dejado claro que los Lakers no están interesados ​​en la reconstrucción.

La moratoria finaliza el 10 de julio y ahí se sabrá la verdad. Pero habrá un montón de reuniones, lanzamientos de ventas y llamadas de conferencia. El escenario está listo.

Muchos aseguran que James, Wade y Bosh retornarán a Miami. Se espera que Nowitzki a aceptar menos dinero para quedarse en Dallas Mavericks y dar la oportunidad de rediseñar él y los Suns han dejado claro que Bledsoe no va a ninguna parte en todo.

Por supuesto, hasta que no esté firmado un contrato cuando termine la moratoria, puede pasar cualquier cosa. Por ahora, cualquier equipo con gran cantidad de dinero y una visión para un futuro próspero tiene la única cosa en la liga tan potente como el propio James: esperanza.