Ahora el líder de la CGT está imputado en la causa y en noviembre, el juez Oyarbide allanó el sindicato de Choferes de Camiones en busca de troqueles supuestamente truchos para ser presentados ante la Administración de Programas Especiales (APE) con el objeto de cobrar reintegros para tratamientos de alta complejidad que no se habrían practicado.

Oyarbide involucró al principal proveedor de Moyano, Daniel Hendler, quien fue procesado en esta causa el 2 de diciembre luego de una escucha polémica donde Hendler “encargaba” la impresión de troqueles para Camioneros.

Esta maniobra ya fue prácticamente probada en otro expediente en manos del juez Claudio Bonadio quien después de allanar tres veces a la Obra Social camionera, al APE y a la droguería Urbana -de Hendler-, realizó un peritaje en el que encontró que había por lo menos 200 troqueles falsos presentados ante el APE por el que cobraron 400 mil pesos. Por esto, fueron procesados Hendler, un ex titular del APE y contadores de la obra Social camionera. Un segundo peritaje comprobaría lo mismo.