Qué indican Brasil y EE.UU. de lo que pasa en el mundo (II).

Qué indican Brasil y EE.UU. de lo que pasa en el mundo (II).

Por: Jorge Fontevecchia. El gurú de Bolsonaro, el filósofo Olavo de Carvalho, escribió su ópera prima, El jardín de las aflicciones, como un libro de ética crítico de Epicuro (quien se reunía con sus discípulos en el jardín) y del materialismo que desde el filósofo griego derivaría hasta llegar al marxismo.

Olavo de Carvalho comienza su libro obligado a ser autorreferencial, y también yo deseo aclarar a los lectores de estas columnas cuál es mi posición al escribir sobre él, diciendo primero que simpatizo con Epicuro (rendí libre Etica en la Facultad de Filosofía, aprobando con 10 al criticar la simplificación de reducir Epicuro al hedonismo). Y acerca del marxismo y la defensa de la derecha que realiza Olavo de Carvalho, aclarar que mi subjetividad puede estar influida porque hoy se cumplen cuarenta años de cuando fui secuestrado por la dictadura militar y llevado al campo de detención El Olimpo. Es probable que una dictadura militar tanto peor en Argentina que en el resto de Latinoamérica nos haya vacunado a nosotros de otros Bolsonaro, como también es probable que el gobierno de Salvador Allende haya vacunado a los chilenos de marxismo.

Pero tantas disidencias a priori, y ser parte en mi caso de lo que Olavo de Carvalho denomina “marxismo cultural” no me impiden reconocer en el padre de la derecha brasileña agudeza y cierto genio en sus posiciones contraculturales y su forma de provocar a lo Nietzsche (salvando las diferencias).

Olavo de Carvalho fue afiliado al Partido Comunista en los años 60 en Brasil, y la decepción con su fracaso le pudo haber inspirado una vocación opuesta con la fe del converso pero mantuvo la alegría de su pluma como buen periodista que fue. Chesterton escribió: “Cuando el hombre ya no cree en Dios, no es que no crea más en nada: cree en todo”; con esta cita comienza Olavo de Carvalho el primer capítulo sobre Epicuro, cuyo tema central son los imperios, cómo se recrean siempre a lo largo de la historia de la humanidad disimulando con falsedades su verdadera motivación por el poder y la conquista, así como la política es el resultado de la cultura. Después de El jardín de las aflicciones, Olavo de Carvalho escribió varios libros, más vendidos, como el Imbécil colectivo –que vendió medio millón de ejemplares–, donde critica a los intelectuales que aparecen en los medios. Pero El jardín de las aflicciones mereció hasta una película, que se financió con crowdfunding de los seguidores individuales de Olavo de Carvalho (se puede ver en iTunes: http://bit.ly/jardimiTunes y en Google Play: https://play.google.com/).

El gurú de Bolsonaro cree que el "marxismo cultural" se infiltró en el Vaticano a través de la Teología de la Liberación.

La tesis de Olavo de Carvalho se centra en que, siguiendo las ideas de Antonio Gramsci, el socialismo/comunismo infectó al periodismo y las universidades para cooptar la mente de los intelectuales y producir la revolución sin la lucha armada, después de haberla perdido por las armas. Y sus ideas construyeron el relato de Bolsonaro, cuyo diccionario base, según bien describe la revista Veja, se conforma de los siguientes significantes:

Globalismo: Proceso de reducción de las identidades nacionales y la soberanía política de los países donde los valores morales y culturales de cada nación son gradualmente sustituidos por un conjunto de ideas internacionales y comunes a todos que no consideran las características históricas y regionales de cada pueblo. Desde la perspectiva de la derecha, es el equivalente al concepto de imperialismo para la izquierda.

Marxismo cultural: La influencia cultural que activistas políticos y teóricos de izquierda ejercen en diversas áreas de la producción cultural, como música, teatro, cine, periodismo y la propia educación para diseminar conceptos políticos comunistas y socialistas, entre ellos también la ideología de género.

Adoctrinamiento: Imposición a los estudiantes por parte de los profesores de valores morales y políticos vinculados a la izquierda.

Parcialidad (“viés”) ideológica: Como consecuencia del adoctrinamiento, el mecanismo de abordar cualquier cuestión desde la óptica de la izquierda.

Socialismo: Aunque este sistema político jamás se haya implementado efectivamente en Brasil, es la identificación con el socialismo que tuvieron los gobiernos anteriores al implementar políticas de izquierda promoviendo el marxismo cultural.

Foro de San Pablo: Entidad internacional formada por partidos políticos de 26 países de América Latina, fundada en 1990 con la intención de promover los ideales de izquierda en la región.

Tradición judeocristiana: El conjunto de creencias y valores morales comunes a los países de Occidente y Brasil.

Escuela sin partido: Proyecto de ley que prohibirá la discusión de cuestiones morales, políticas y sexuales en las aulas de los colegios para evitar el supuesto adoctrinamiento de los alumnos, especialmente en las ideas políticas de izquierda y la ideología de género. Ideología de género: Teoría que establece la independencia entre el sexo biológico y el género permitiendo, por ejemplo, que un individuo biológicamente hombre adopte una expresión de género femenino y se identifique como mujer. También, relacionado con el papel social de hombres y mujeres más la desigualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en la sociedad.

Kit gay: Material didáctico del programa Escuela sin Homofobia, promovido por el gobierno en 2011 para estimular en las aulas el respeto a las personas LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y trans).

Ciudadanos de bien: Personas que no cometieron delitos y tienen derecho a gozar plenamente de todos los derechos sociales básicos, entre ellos el de poder portar armas para defensa personal.

Humanos derechos: Una variante de “ciudadanos de bien” para quienes deben ser garantidos los derechos humanos básicos, entre ellos la seguridad.

Excluido de ilicitud: Nueva garantía legal a la policía y todas las fuerzas de seguridad que ejecuten a un criminal en servicio o en su defensa personal, de no ser castigados ni siquiera investigados.

Terrorismo: Además de los significados comunes, se utiliza esta palabra para calificar invasiones a propiedades organizadas por movimientos sociales.

Políticamente correcto: Censura a críticas, chistes y manifestaciones jocosas dirigidas a sectores vulnerables y minorías que para Bolsonaro debe dejar de existir por tratarse de un victimismo que restringe la libertad de expresión, Victimismo y “mi mi mi”: Creencia de que militantes de grupos minoritarios buscan publicitar cualquier manifestación contraria a sus intereses como una forma de discriminación, logrando finalmente tener privilegios frente a las mayorías.

Para Olavo de Carvalho, el problema del mundo está en el paso de la conciencia individual a la colectiva (la opinión pública), que comienza con la Revolución Francesa. El gurú de Bolsonaro se fue a vivir a Estados Unidos cuando en Brasil asumió el gobierno del Partido de los Trabajadores. Lo explicó así: “Brasil estaba tan loco que si me quedaba terminaría volviéndome loco”. Vive en Virginia, a una hora de auto de Washington, donde enseña en la universidad local y conduce sus cursos de filosofía a distancia (www.olavodecarvalho.org). Hasta allí fueron los hijos de Bolsonaro a participar de sus conferencias y fotografiarse con él. Rechazó ser ministro de Cultura de Brasil pero dos de sus discípulos son los estratégicos ministros de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo, y de Educación, Ricardo Vélez, cuyas intervenciones ya comenzaron a generar controversias.

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