Los choques entre un grupo de jóvenes que arrojó piedras y los uniformados, que respondieron con disparos de balas de goma y gases lacrimógenos, provocaron varios heridos y destrozos en automóviles, viviendas y comercios de la zona de Intendente Ratti y Grecia.

Los incidentes se produjeron después de que vecinos denunciaran al menos dos intentos de secuestro, entre ellos el de una niña de 2 años, que atribuyeron a personas que trabajan en un circo instalado hace meses en esa zona del oeste bonaerense. 

Jonathan Ferreira dijo que el 22 de junio presentó una denuncia por el intento de secuestro de su hija de 2 años en la Fiscalía de Morón, pero que no quedó asentada, por lo que ayer acudió a la Fiscalía de Ituzaingó, donde finalmente se formalizó.

"La policía no me dio bolilla. Si no fuese por un vecino, a mi nena no la tengo", dijo el joven de 23 años en declaraciones al canal Todo Noticias, y aseguró que testigos vieron cuando los ocupantes de una camioneta blanca Citroen Berlingo intentaban llevarse a su hija.

En medio de la protesta, los vecinos mantuvieron cruces verbales con funcionarios municipales y acusaron al intendente Descalzo de "liberar la zona" tras sacar los móviles de la policía municipal. Descalzo se manifestó "sorprendido" por los incidentes entre manifestantes y la policía, aseguró que "no hay ni hubo ningún secuestro de un chico en Ituzaingó" y consideró que "hay gente que está dando manija desde afuera a los vecinos".

"Alguien está fomentando este tipo de cosas, alguien lo está haciendo. No creo que sea un sector político. Alguien está aprovechando esta situación en favor propio", sostuvo el jefe comunal en declaraciones al canal TN, y agregó: "Hay dos denuncias de vecinos sobre intentos de secuestro, pero ninguno de los hechos se perpetró".

En tanto, una vecina acusó de "mentiroso" a Descalzo y ratificó que se produjeron episodios confusos en la zona desde que el jefe comunal retiró a la policía municipal. "No es política, Descalzo. Hay dos denuncias reales", dijo la mujer, a cuyo hijo le destrozaron el automóvil Renault 12 que tenía estacionado sobre la calle Grecia, durante los enfrentamientos entre vecinos y policías. Esta madrugada, alrededor de las 2, un grupo de vecinos autoconvocados a través de las redes sociales provocó incidentes en el predio donde se instaló el circo Royal Windows, a cuyo personal acusan de haber intentado secuestrar a una niña, y fueron dispersados por la policía.

"Nosotros nada que ver con lo que está pasando acá. Trabajamos mi papá, yo y muchos empleados, con la construcción del circo. Están los que hacen malabares, los payasos. Estamos con mi papá constantemente en la casilla. Te lo juro, nadie sería capaz de hacer eso acá, es una locura", manifestó un joven que dijo ser el hijo del dueño del circo.

Las sospechas de los vecinos sobre el circo están fundadas, según dijeron, en que detrás de los carromatos hay estacionados dos automóviles Volkswagen Bora, uno blanco y otro negro, con vidrios polarizados, a cuyos ocupantes acusan de haber perpetrados los intentos de secuestro en la zona.