A la suba de tasas municipales, que ya están aplicando varias comunas de la provincia, la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza aprovechó el incremento para combatir los espacios "vacíos" que impregnan la capital provincial: aplicó un "impuestazo" sobre los terrenos baldíos, con incrementos del 100 por ciento.

Sandra Tennerini, directora de Hacienda del municipio, explicó que la medida consiste en la creación de una "sobretasa" sobre los terrenos baldíos de la Ciudad capital, que consiste en un recargo del 100 por ciento sobre el valor que el propietario de ese descampado abona a la comuna.

El objetivo del "impuestazo", según la funcionaria, es "incentivar la construcción en la ciudad encareciendo los costos de mantenimiento de los baldíos".

Además, Tennerini consideró que esos terrenos "generan inseguridad y focos de infecciones", e hizo hincapié en este último factor: "Los roedores son quienes encuentran refugios en esos lugares, ya que generalmente el mendocino desprevenido que no cuida el medioambiente tira la basura en esos espacios, a pesar que los terrenos cuentan con el cierre perimetral correspondiente".

Sumado al paliativo de la inseguridad y focos de contaminación, la erradicación de baldíos traería inversiones, primero en el sector de la construcción y luego en otros aspectos, que dinamizaría aún más la economía local. Incluso podría repercutir en un crecimiento demográfico en la zona céntrica.