El horno no estaba para chistes, café caféeee y rumores y malestares

El horno no estaba para chistes, café caféeee y rumores y malestares

El bombero loco. La vocación médica es algo maravilloso. Algún viejo profesor dijo: “Crees que venís a curar y tan solo estas aquí para cuidar”.

 

El efervescente doctor Gustavo Blanco parece tener una vocación de servicio aún más arriesgada, la de bombero. Y en su flamante ropaje de coordinador de gabinete salió a apagar el incendio político que tenía un intendente encerrado en su despacho y más de cincuenta vecinalistas reclamando el pago de los convenios.

El funcionario no tuvo mejor idea que contestar como payamédico tirándole un chistecito de salón a los vecinalistas de zona norte: “¿Con el convenio de la Sociedad de fomento le pagan a Copetel?” en referencia a la cooperativa que creció al calor del servicio monopólico telefónico y una democracia similar a la AFA y con Mario Saúl Noejovich oficiando deJulio Grondona.

El horno no estaba para bollos y el chascarrillo fue un baldazo de nafta. Blanco salió rápidamente de su primer entrada en escena y Arroyo tuvo que salir de su cueva, donde se encuentra alejando hace casi un mes de las conferencias de prensa.

 

Hablando de Copetel…

La Sala “B” de la Cámara Nacional en lo Penal Económico condenó a la Cooperativa Telefónica Carlos Tejedor de Provisión de Servicios Públicos, Vivienda, Provisión y Consumo Telefónico Limitada, (Copetel) al pago de una multa de un millón de pesos.

La importante multa a pagar se produjo a raíz de una sanción económica aplicada por la Secretaría de Comercio Interior de la Nación debido a una presentación efectuada por el usuario de Copetel, Daniel Seoane, ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia.

En el fallo, se indica que “los operadores de telefonía de larga distancia se vieron limitados de contar con la información necesaria para considerar la posibilidad de ingreso al mercado conformado por el área de servicios de Copetel”.

A su vez, se remarca que “los consumidores se vieron impedidos de contar con los beneficios del ejercicio de la libre competencia, que redundarían en variedad de servicios y precios inferiores”.

 

Alquileres cuidados

Quizá el apellido Volponi provenga del italiano Volpone, aumentativo de volpe, zorro, que a su vez por definición es persona inteligente o astuta.

Si la etimología del apellido es correcta difícilmente el titular del Emder,Guillermo Volponi, caiga en la burda trampa tendida por el empresario gastronómico que poco a poco va armando una cadena de cafés con fuertes símbolos sobre el poder.

La empresa de la famosa “fuentecita de metal dorado” no ha parado de mover sus influencias para monopolizar la cafetería de emblemáticos edificios públicos, así llegó al interior del edificio Jules Dormal de la exterminal Sud del Ferrocarril, donde como parte de la sociedad liderada por Aldrey Iglesias construyó un shopping en tierras públicas.

Peor aún la historia del canon irrisorio que abona por explotar un enorme espacio dentro del Museo MAR, apenas podría ser atendible si fuese mensual, situación que puede certificar cualquier comerciante de bien y sin poder de lobby que este por renovar su contrato de locación.

La necesidad de quitar el Museo de las Comunicaciones de la emblemática casona del acceso a Parque Camet no sería otra cosa que la embestida de este depredador cafeteril quien intenta emplazar ahí otro eslabón de su cadena.

Manejos irregulares denunciados sobre el cobro de entradas al parque, el faltante de elementos que habían sido prestados a la administración, más la necesidad de alambrarlo, arbolarlo y ponerlo en valor, han sido el caldo de cultivo para estas trasnochadas ideas de privatización y negocio de unos pocos.

La intangibilidad de bienes culturales y el acceso irrestricto a los espacios públicos debieran ser las premisas del gran zorro, el mismo que intentó arancelar los polideportivos. Por suerte de aquel tremendo error recapacitó.

 

Convenio que hace ruido

El intendente Arroyo elevó a consideración del Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza por el cual se autoriza al Departamento Ejecutivo local a suscribir un Convenio Marco de Colaboración recíproca con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el cual tiene como objeto el diseño e implementación de políticas públicas y acciones en materia de intercambio cultural, económico, histórico, educativo, científico, social, deportivo y turístico.

Concejales opositores sospechan que este convenio será la llave para blanquear el desembarco de la Red de Innovación Local (RIL) al Ejecutivo marplatense. Se trata de una ONG vinculada al gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que le abastecerá a la comuna de recursos de gestión, entre ellos, un tablero de comando que buscará monitorear la evolución del gobierno de Arroyo.

 

Serpientes y escaleras

El gobierno de Carlos Fernando Arroyo se parece bastante al famoso y simple juego de mesa cuyo azar puesto a manos de un dado nos hacía subir o bajar rápidamente según caíamos en el reptil o al pie de los peldaños.

Las renuncias parecen caer minuto a minuto y cuando no se terminan de digerir o entenderlas, aparece otra que desconcierta a propios y extraños.

A este ritmo y de sobrevivir al resto de los cuatro años de gestión, es posible que medio padrón electoral haya pasado al menos unas horas por el gabinete. Desde la oposición bromean: “Se escapan más funcionarios del gabinete de Arroyo que presos de la cárcel de Batán”.

El rumor más fuerte horas después de la salida de José Reinaldo Cano, quien podría desembarcar en las filas de Sergio Massa,  indicaba que Silvana “La Tanqueta” Rojas era la próxima en despedirse por sufrir “ataques de pánico”. 

La falta de recursos, los fuertes reclamos de sus pares y algún error en la elección de un funcionario de la breve gestión anterior, la habrían llevado a elevados niveles de stress hasta sufrir algún episodio de pánico, incluso sus amigos más íntimos le aconsejaban no manchar su buen nombre.

Rápidamente los referentes del Pro lo negaron, como habían negado días atrás la salida del secretario de Hacienda, horas más tarde la propia Rojas negó las versiones.

Ahora la usina de chismes genera un nuevo y pesado clima de tensión con los aliados de Arroyo de la Unión Cívica Radical. Vetaron la posibilidad del esposo de la concejal Cristina Coria, Alberto Becchi, de asumir en Producción y Vilma Baragiola perdiendo la firma de esa área amenaza con su vuelta al Concejo Deliberante.

La novela sigue, no se sabe bien cómo, pero el argumento contiene más renuncias.

 

Firme como rulo de estatua

El exsubsecretario de Cultura, Christian Rabe, no solo demoró la presentación formal de su renuncia, solicitada por Silvana Rojas sino que no abandonó la oficina en Plaza del Agua donde seguía acumulando reuniones de producción como secretario sin cartera.

En las últimas horas, fue formalizado su traslado a la Villa Victoria donde fue a reportarse y dicen  que habría permanecido apenas unos pocos minutos de esas 45 horas que debe prestar por semana.

Su breve paso le sirvió para fraternizar con sus nuevos compañeros y mostrar en su teléfono celular el video subido a la plataforma youtube con una sátira musical dedicada a la titular de Cultura.

Todo volvió a la normalidad y como el cuento de los dos delfines que se preguntaban por la actividad del papá: “¿Qué hace? Nada, nada”.

 

Después de un chori, se viene el postre: cubanito relleno de dulce de leche

Mientras avanza un proyecto de ordenanza para regular la venta de choripanes en la vía pública, se ha presentado una nota en el Concejo Deliberante para que se permita también la comercialización de cubanitos rellenos de dulce de leche en las calles marplatenses.

En el texto, se reclama que se permita “el desarrollo de la actividad de relleno de cubanitos con dulce de leche y venta en la vía pública desde un carro diseñado y apropiado a tal fin”.

Además, se citan a las ciudades de Miramar y Bahía Blanca que han permitido esta actividad.

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