Utilizar la erupción del volcán Copahue -moderada, por cierto- como motivo de atracción, fue importante, como quedó demostrado. Por convenio con hoteles y alojamientos, se premió a quienes viajaron especialmente con la noche del viernes con alojamiento gratuito. Y este sábado se sacó la foto, bajo el lema “500 al pie del volcán Copahue”. Y fueron más.

Este fin de semana, además, se vivió a pleno la “Fiesta del Volcán”, parte de la misma iniciativa, con eventos artísticos, gastronómicos, deportivos.

Ha sido una manera de superar un momento difícil, trasmutando lo negativo en positivo, pero por sobre todo, convalidando el hecho de que vivir y hacer turismo al pie de un volcán tiene estas cosas, pues forma parte de la naturaleza y su riesgo.