Helios Salud ganó el Premio Nacional a la Calidad 2019, en la categoría Sector Privado, y se convirtió así en la primera institución de su rubro en recibir este galardón tan importante. En una ceremonia que se llevó a cabo en el auditorio del Banco Nación, el Dr. Daniel Stamboulian, Presidente del Centro, y Marta García, la Directora Ejecutiva, fueron los encargados de recibir la distinción de manos del subsecretario de Inserción Internacional, Juan Carlos Hallak, y de Santiago Murtagh, a cargo del consejo de administración de la Fundación que otorga el premio.

Helios Salud es el mayor centro ambulatorio infectológico especializado en VIH y hepatitis de Latinoamérica. Encabezado por el Dr. Stamboulian, la institución se dedica a la atención, seguimiento y tratamiento de las personas que viven con VIH, a quienes ofrecen un sistema de control integral único en el país. Profesionales altamente capacitados trabajan de manera interdisciplinaria para brindar una atención de excelencia, personalizada, rápida y con la tecnología más moderna. Con el tiempo los servicios se ampliaron y hoy también se atienden enfermedades infecciosas como hepatitis A, B y C, respiratorias, urinarias, de transmisión sexual y otras. El contacto constante con los pacientes tanto desde el área médica como desde la parte administrativa hacen la diferencia.

Helios Salud ganó el Premio Nacional a la Calidad 2019, en la categoría Sector Privado.

Todas estas cualidades fueron justamente las que tomó en cuenta el comité evaluador para determinar que Helios Salud merecía el galardón. María Inés Baque, Secretaria de Gobierno Digital e Innovación Tecnológica, abrió la ceremonia y explicó que a la hora de premiar se tiene en cuenta la capacidad de liderazgo, la mejora de procesos, la innovación tecnológica y, en el caso de las entidades públicas, que los servicios estén enfocados en el ciudadano y haya una vocación de gobierno abierto, con los datos a la vista. Adelantó que para la próxima edición además se evaluarán otros factores como la perspectiva de género y la sustentabilidad, en sintonía con los temas que se discuten en el mundo en este momento.

“Recibir el premio este año tiene doble mérito, por las incertidumbres. Es un desafío a nivel país promover la calidad. Tenemos la obligación de generar una cultura de la calidad en todo lo que hacemos”, indicó Juan Carlos Hallak, en el escenario. A él le siguió Santiago Murtagh, quien destacó la diversidad de los ganadores y también se refirió a las dificultades que hubo este año en el país. “Ganar este premio es muy movilizador, muy holístico. En otras épocas de crisis quedó desierto, y esta vez no. En un año malo es difícil tener buenos resultados y estas empresas lo hicieron”, indicó.

Después de estas palabras llegó el momento de la entrega de los premios. En primer lugar subieron al escenario los representantes de Helios Salud. A continuación retiraron su galardón diferentes entidades públicas que fueron reconocidas por su labor. El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, estuvo presente para entregar una distinción a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte. Mientras tanto, el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, hizo lo mismo con el Centro de medicina comparada del Instituto de Ciencias Veterinarias del Litoral y con la facultad regional Buenos Aires de la Universidad Tecnológica Nacional.

El Dr. Stamboulian junto al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich.

Fue Finocchiaro el encargado de cerrar la ceremonia, con un discurso que apuntó a fomentar el equilibrio entre lo privado y lo público para promover el desarrollo del país. “He disfrutado mucho este evento porque tiene la síntesis de la Argentina que queremos”, indicó. “Están juntos el sector privado y el sector público, se premia la calidad y la transparencia. El sector público tiene que ser claro. Yo soy un empleado de ustedes, que son mis jefes. Para nosotros es un imperativo moral, crucial”, agregó. Se refirió luego a la dicotomía que plantean ciertos gobiernos, que desprecian lo privado y se vuelcan hacia lo público, o los que hacen efectivamente lo contrario. “Todos los países que se desarrollaron tuvieron una completa sinergia entre el sector público y el privado. El Estado no produce riqueza, eso lo hacen los ciudadanos. El Estado debe regular, con libertad, y redistribuir la riqueza”, continuó.

El Ministro de Educación habló luego del conocimiento y lo definió como “el commodity más importante en el mundo”. En ese sentido, opinó que el Estado debe apoyar firmemente a los que lo generan. “Nuestras universidades tienen que seguir liderando. Tenemos que trabajar para que la Argentina se desarrolle, especialmente en las áreas vacantes”. Destacó entonces la importancia de que las nuevas generaciones se inclinen por la geología, la ingeniería, la enfermería o el cuidado de pacientes, las carreras relacionadas con datos o las que estudian la explotación sustentable del litoral marítimo, así también como el turismo y todo lo relacionado con las energías renovables.

“Tenemos un futuro magnífico por delante, que tiene que ver con el desarrollo del talento. El futuro no es algo malo sino algo maravilloso que tenemos que crear”, dijo. Por último, utilizó una metáfora que resumió muy bien el espíritu de los Premios a la Calidad, que apuntan a la mejora constante y al desarrollo. “Cuando soplan vientos de cambio algunas sociedades construyen muros para detener el viento. Pero hoy en día todos los muros se cayeron. Otras sociedades aprovechan ese viento, construyen molinos y se hacen prósperas. Construyamos molinos”, cerró.

En el final, los ganadores subieron al escenario para la foto final, en la que compartieron la alegría por el reconocimiento.