Eva Moyano, del gremio de Camioneros, y Cristina Ledesma, del sindicato de Obreros de la Industria del Pescado, se reunieron este viernes con el intendente Carlos Arroyo. ¿El motivo? Pedirle que interceda ante Camuzzi por el recorte de gas en las harineras del puerto. “Que no puedan procesar los residuos de pescado, que son contaminantes, pone en riesgo la cadena productiva”, explicaron y reconocieron que temen por “reducciones horarios o despidos”.

El reclamo que las dirigentes sindicales elevaron al jefe comunal quedó redactado en un documento que ambas firmaron y al que tuvo acceso 0223. En él se explica que “las harineras tienen convenios firmados con Camuzzi en donde consta cuál es el consumo que deben tener en forma diaria de gas. En general, 16,000 m2 y en invierno, 21,000 m2”.

“El tema -apuntaron- es que están categorizadas como grandes consumidores, sin tener en cuenta el tipo de material que tratan, o sea, material biológico contaminante. Son recicladoras de residuos orgánicos a grandes volúmenes, ya que para dar una idea de la magnitud de residuos que procesan, éste es igual a la cantidad que genera la población de manera diaria. El uso del gas es indispensable en todo el proceso productivo, porque todo comienza con las calderas que generan el vapor para los distintos equipos en uso de la línea productiva”, explicaron Moyano y Ledesma.

En este sentido, contaron que “en diferentes momentos sucedía que Camuzzi solicitaba a las harineras que bajen el consumo o que lo cortaran por algunas horas, para luego retomar la actividad de manera habitual, lo cual no generaba un inconveniente mayor ya que era de manera esporádica. Sin embargo, el problema se ha generado en estos días por la crisis energética”, deslizaron.

Según Moyano y Ledesma, “el ente regulador le solicita a esas empresas que el consumo sea cero, lo cual hace que no se pueda procesar ese residuo contaminante, por lo que al no poder producir, tampoco puede seguir acumulando los residuos que generan las plantas de fileteado, con lo que se podría generar un corte en la cadena productiva, no sólo de la harinera, sino también de los frigoríficos de nuestros puerto”, advirtieron y subrayaron que la situación “no sólo genera un problema para el proceso de los residuos, sino que además hace posible un conflicto para nuestros trabajadores, ya que al no haber producir en el corto plazo podría haber reducción horaria, de turnos y hasta despidos”, alertaron las dirigentes de los gremios que manipulan el pescado y que lo trasladan. “Es muy grave para todo el sector esta situación y necesitamos de su colaboración para buscar una solución urgente”, pidieron, sobre el final, Moyano y Ledesma a Arroyo.