Hallan asesinada a una nena que estaba desaparecida

Hallan asesinada a una nena que estaba desaparecida
Tenía 7 años. El sábado salió de su casa y ayer la encontraron en un arroyo, en una bolsa. Su madre había hecho la denuncia 38 horas más tarde. Anoche, la mujer y el padrastro quedaron detenidos.

La nena, de 7 años, había desaparecido de su casa hacía tres días, pero su mamá tardó 38 horas en hacer la denuncia. La Policía primero la buscó en casas de amigos y familiares. Luego empezó con los rastrillajes. Finalmente ayer fue encontrada de la peor manera. Su cuerpo estaba tirado en un arroyo, parcialmente calcinado, y envuelto en una bolsa de plástico.

Por el hecho fueron detenidos anoche la madre y el padrastro de la nena. La principal hipótesis es que se excedieron con una paliza y se deshicieron así del cuerpo de la nena para eliminar los rastros.

El cadáver de Priscila Morena Lafuente fue hallado a la mañana entre los pastizales y arbustos de un arroyo ubicado debajo del puente de avenida Mitre, casi calle 44, en Berazategui, próximo al límite con la vecina localidad de Hudson, en el sur del Conurbano.

El arroyo, de unos siete metros de ancho y con poco caudal de agua, está ubicado a unos 800 metros de la casa de la madre de Priscila, donde la nena vivía con su padrastro, un policía federal de la División Bomberos (está en disponibilidad pero sigue perteneciendo a la Fuerza) y seis hermanos.

El comisario general Osvaldo Castelli, jefe de la Superintendencia de Seguridad, contó que la nena desapareció de su casa el sábado pasado, pero que su madre lo denunció recién el lunes en la comisaría de su barrio.

“ La mamá aseguró que con su pareja se habían ido a dormir alrededor de la medianoche y al otro día, a las diez, constataron que (la nena) no se encontraba dentro del domicilio ”, explicó Castelli.

La Policía de Berazategui inició inmediatamente el protocolo de búsqueda e inspeccionó casas de amigos de la familia, estaciones de trenes y hospitales de la zona.

“Se la buscó por todos los lugares donde podía estar viva. Y cuando no se la pudo encontrar en esos lugares, se empezaron a revisar campos y arroyos.

Llama la atención que la familia haya tardado 38 horas en hacer la denuncia. Ese tiempo era fundamental para la investigación para poder encontrarla con vida”, resaltó a Clarín una fuente del caso.

Los padres de Priscila se separaron cuando ella era muy chica. La víctima no había sido anotada en el Registro Nacional de las Personas: era indocumentada.

Además, nunca fue al colegio.

“La nena vivió siempre con su padre biológico en el partido de Lanús, pero hace dos meses la mamá logró sacarle a Priscila al papá y se la llevó a vivir con ella”, aseguró un investigador.

El cuerpo de Priscila fue reconocido por su padre en la morgue de Quilmes. Ayer a la tarde, además, se dio a conocer que uno de los hermanastros de Priscila denunció que la mamá de la nena golpeaba a su hija.

“El cuerpo tenía partes quemadas y estaba dentro de una bolsa.

Ahora no sabemos cómo fue asesinada, ni cuándo o si fue abusada. Todo eso lo va a develar la autopsia, pero el cadáver tuvo que ser enfriado para recién mañana (por hoy) tratar de hacer la autopsia”, explicó a Clarín una fuente judicial.

En tanto, luego del hallazgo del cuerpo, los peritos policiales buscaron rastros en la escena del crimen que permitan tanto identificar a los homicidas como conocer si la víctima fue asesinada e incinerada en el lugar, o si allí sólo se limitaron a descartar el cadáver.

Además, procuraban levantar huellas de rodados o calzados e incluso de arrastre, si es que el cuerpo fue bajado desde un auto y llevado hasta la vera del arroyo.

“A pesar de que el padre ya la reconoció, como la nena era indocumentada se van a realizar todos los estudios científicos para determinar legalmente que el cuerpo sea el de Priscila. Seguramente se hará una prueba de ADN”, subrayó el jefe policial a cargo del caso.

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