"En tiempos críticos para la supervivencia de las pymes regionales, hay muchos aspectos que atentan contra la existencia misma de las micro, pequeñas y medianas empresas especialmente del interior del país, amén de la situación en que nos ponen las alzas indiscriminadas de las tarifas de electricidad, gas y agua, aumento de la presión impositiva y reducción drástica del mercado interno", menciono el presidente de la Federación Económica de Formosa, contador Enrique Zanin .
"Para nuestras economías regionales, diría que para el país todo, el comercio ilegal suma un flagelo más para nuestras pymes, un flagelo que día a día se consolida en todo el país y al que las autoridades no oponen los sistemas de control que debieran. Se ha instalado una especie de "laissez faire" del comercio informal, al que todos miran en la habitualidad de la vida cotidiana en muchos lugares de nuestras ciudades, sin que nadie tome recaudos y haga prevención y represión de esta forma de comercio y producción ilegal que maneja el contrabando, la falsificación y copia de marcas, a su antojo. Formosa no es ajena en absoluto a esta situación", determino Zanin.
"Según informe de CAME, la venta ilegal le quita aproximadamente $ 60.000 millones por año al comercio regulado, en 451 ciudades del país, restándole a las arcas del Estado $ 12.000 millones de recaudación impositiva que bien podría derivarse en medidas de promoción a las pymes regionales que estamos escasos de herramientas e instrumentos que alienten la producción y el comercio legítimo, aquél que genera empleo sustentable, paga sus impuestos y contribuye a la paz social", dijo.
"Al decir de CAME, "hay ferias ilegales que tienen patios de comida, están bancarizadas donde el cliente puede pagar con tarjetas de débito o crédito". Un verdadero desatino que ningún funcionario público, tanto de las ciudades afectadas como del gobierno nacional, tiene el "coraje" de acometer o simplemente no asumen la responsabilidad conferida para cumplir con su deber", especifico.
"CD, DVD, Videos Juegos, ropas, calzados, mascotas, alimentos, herramientas, equipos electrónicos, textiles, etc., etc., forman parte del gran bagaje de elementos falsificados, marcas copiadas ilegalmente, o simplemente producto del contrabando, que restan posibilidades a las pymes de trabajar y comercializar", indicó.
"Todos miran hacia otro lado "como perro que tumbó la olla", pero habrá un tiempo en que deberemos asumir nuestra responsabilidad no solo como fiscalizadores, sino como consumidores, para evitar que el país se vuelva un gran mercado persa donde todo lo que se consuma, use y utilice sea "made in".", y la industria nacional sea solo un viejo sueño de una generación a la que obligaron a quemar las naves en búsqueda del dinero fácil y el menor esfuerzo", finalizó.
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