En el funeral, el médico y su esposa Mabel recordaron al diseñador con cariño
"Fue más que feliz", aseguró la madre del modisto, quien solía ayudar a Ibáñez cuando trabajaba en su atelier ubicado en el barrio de Recoleta. "Es muy difícil para nosotros... Vivir sin mi hijo va a ser muy triste. Nos quería tanto", afirmó Jorge padre.
Cuando los periodistas le agradecieron por dejarlos cubrir el funeral, el médico cardiólogo les contestó: "Él los quería a todos ustedes, era su vida. Ustedes eran su vida, parte de su vida".
"Él era un tipo muy particular, creyente en Dios, todo para adelante siempre. Todo positivo era mi hijo, los quería con locura, a la madre la quería. Dios mío como la quería", agregó el señor.
Por último, Mabel señaló que querían darle el último adiós al modisto con alegría: "Mi hijo era así, no quería llanto, 'mamá nunca llores' me decía".
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