El Gobierno quiere evitar que el conflicto con los maestros se extienda a todo el país

Convocarán a los gremios docentes para avanzar en un acuerdo y desalentar protestas

Con la intención de que el conflicto salarial de los docentes no se extienda al resto de las provincias, la Casa Rosada convocaría en los próximos días al Frente Nacional Gremial para avanzar en un posible convenio colectivo de trabajo para los maestros, un trato que fue incluido en el acta paritaria de abril pasado, pero que aún está pendiente.

El "convenio marco", como figura en el acta 1243441/07, es un requisito clave exigido por los gremios y por el que el Gobierno debió haber citado a las partes hace ya tres meses. Para los maestros, significaría bajar en tinta de manera oficial sus derechos y condiciones laborales, más allá de la discusión por subas salariales que se negocia durante la paritaria.

"Si no se cumplen los acuerdos previamente firmados, el conflicto será inevitable. De hecho, ya hay sectores que amenazan con no comenzar las clases después del receso de invierno", coinciden los dirigentes de los cuatro sindicatos docentes (UDA, Sadop, AMET y CEA) que se agrupan en la CGT oficialista, que encabeza Antonio Caló. También forma parte del Frente Nacional la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), que integra la CTA oficialista de Hugo Yasky. Entre estas organizaciones definen cada año las alzas salariales de alrededor de 950.000 docentes de escuelas públicas y privadas subsidiadas.

Al tanto del malestar de los sindicatos, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Educación, Alberto Sileoni, recibirían la semana próxima a la cúpula del Frente Gremial, según pudo saber LA NACION de fuentes gremiales. ¿Por qué el encuentro no es inminente? Capitanich habría pedido más tiempo, ya que mañana irá al Congreso para exponer la gestión del Gobierno.

Al igual que los docentes de la provincia de Buenos Aires, los gremios de representación nacional presionarán también por un plus salarial ante la escalada inflacionaria. Acordaron en abril pasado un aumento anual de casi el 29%, lo que llevó el salario mínimo de un maestro de $ 3416 a $ 4400. Inicialmente, habían solicitado un alza del 61%. Por el Gobierno, sellaron ese trato Sileoni y Noemí Rial, número dos del Ministerio de Trabajo.

Con el sueldo inicial de los docentes en $ 4400, al Gobierno se le abrirá de manera inevitable un nuevo frente de tormenta en el corto plazo. Sucederá cuando a fin de mes se determine el alza del salario mínimo vital y móvil (SMVM), que actualmente es de $ 3600. El aumento lo definirá el Consejo del Salario, un organismo tripartito, integrado por gremios oficialistas, empresarios y autoridades gubernamentales. Las centrales oficialistas estiman que el SMVM podría elevarse entre un 25% y un 30%, de acuerdo con lo que fueron las paritarias. De ser así, el nuevo valor siempre quedará por encima del sueldo básico de los maestros.

"Si bien no figura en el acta paritaria de abril, el salario inicial del docente no puede quedar nunca por debajo del salario mínimo vital y móvil. Si sucede, será otro punto de tensión para negociar con el Gobierno, además del convenio colectivo", evalúa un docente de la CGT.

El gremialista se entusiasma con una suba salarial automática para los docentes hasta alcanzar el monto en el que se establezca el nuevo SMVM. Pero eso sería improbable, según informaron anoche a LA NACION fuentes oficiales.

El Frente Nacional Docente podría hacer hoy público su apoyo a la medida de fuerza que llevan adelante sus colegas bonaerenses. "Compartimos los reclamos y están en su derecho de hacerlo", dice uno de sus referentes sobre la huelga que los gremios de la provincia activan en contra de la gestión de Daniel Scioli.

EL MAPA DE LOS RECLAMOS DOCENTES

 

Las medidas de fuerza afectaron ayer la actividad escolar en el Chaco, donde el gremio docente realizó un paro, que se repetirá hoy, ante "la falta de convocatoria para tratar una recomposición salarial para el segundo semestre del año", dijeron fuentes del Sitech, el gremio docente de la provincia.En la ciudad de Buenos Aires, sectores disidentes de la Ctera, enrolados en la Federación Nacional Docente, marcharon ayer desde el Congreso a la Plaza de Mayo para reclamar la reapertura de la discusión paritaria y la convocatoria a un paro nacional de maestros.Hubo también marchas, aunque sin afectar el dictado de clases, en Formosa, Salta, Misiones, Santa Fe y Neuquén..

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