La Secretaría de Comercio renovará este viernes, hasta fin de año los planes Ahora 12 y Ahora 18 para consumo de tarjetas de crédito, en tanto procura incorporar la modalidad 3 y 6 cuotas sin interés para calzado, indumentaria y marroquinería, luego de que no se obtuvieran los resultados esperados con el programa de Precios Transparentes.

El gobierno trata de recomponer una opción en el mercado que permita de manera real a las personas comprar en cuotas sin intereses, luego del intento de que los comercios exhibieran el verdadero costo financiero de los planes de pago.

La medida lanzada en febrero golpeó al mercado de tal modo que afectó las decisiones de compra de las personas, por lo que ahora el equipo de Miguel Braun intenta reinstalar la idea del plan de pagos sin interés. 

Fuentes del sector del comercio indicaron que persiste de parte de los bancos una reticencia a entrar en la nueva modalidad porque piden una rebaja de encajes al Banco Central, aunque confían en que el plan va a salir.

El Ministerio de Trabajo, Francisco Cabrera le garantizó a sindicatos del calzado que la nueva opción va a estar disponible desde el 1ro de abril.

Incluso en el sector financiero consideran que los bancos terminarán aceptando la modalidad a pesar de que el Central no acceda a su pedido de reducir encajes para liberar fondos con los cuales comprar Lebacs y financiar en 3 y 6 pagos con los intereses que les pagaría el propio Estado.

Tanto Ahora 12 como Ahora 18 alcanzaron durante 2016 ventas por 70 mil millones de pesos, con más de 26 millones de operaciones. Los rubros con mayor crecimiento durante el último año fueron Librería, Electrodomésticos de línea blanca, Anteojos y Teléfonos Celulares 4G.

Ambas modalidades acumularon desde su implementación en setiembre de 2014 ventas por más de 116 mil millones de pesos con 50 millones de operaciones, de las cuales más de la mitad ocurrieron en 2016.

Desde el inicio del programa el costo financiero ascendió a 1.987 millones de pesos, de los cuales 1.363 millones fueron en 2016.

El programa reduce a las entidades financieras la exigencia de efectivo mínimo en un importe equivalente al 16 por ciento de las financiaciones en pesos que otorguen.

También se reducen los encajes para los bancos que financien a empresas no financieras emisoras de tarjetas de crédito adheridas.

De esta manera, se permite una reducción de la tasa de descuento que habitualmente pagan los comercios al operar con tarjetas de crédito.