El gobierno bonaerense enfrenta críticas de la oposición por el peso de la deuda provincial

El gobierno bonaerense enfrenta críticas de la oposición por el peso de la deuda provincial

 El gobierno de María Eugenia Vidal enviará el presupuesto 2019 en la primera quincena de noviembre. El proyecto, que contempla gastos por encima de los $850.000 millones y autorización para endeudarse por $100.000 millones, según un primer borrador, aún no ingresó a la Legislatura.

Sin embargo, la iniciativa ya genera polémica. La deuda de la provincia es motivo de un fuerte cruce entre oficialismo y una oposición que difícilmente apruebe a libro cerrado un nuevo endeudamiento.

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La oposición presentó sendos pedidos de informes en la Legislatura para que el gobierno dé cuentas sobre el ejercicio presupuestario actual y el volumen de deuda acumulada tras la devaluación del peso.

Sin datos oficiales, la oposición calculó que la deuda tiene un impacto de entre el 70 y el 75% del presupuesto vigente, mientras que los pagos por servicios aumentaron un 37% por la devaluación.

El gobierno de María Eugenia Vidal salió al cruce de los números de la oposición al afirmar que la deuda se mide contra al producto bruto geográfico y no contra presupuesto. En ese sentido, aseguraron que los pasivos no superan el 7%.

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"Es más baja incluso que entre 2007-2011, cuando representaba en promedio el 9,4% del producto bruto geográfico", destacó el Ministerio de Economía provincial en un comunicado.

Lo cierto es que no hay datos actuales sobre el pasivo provincial. El último informe data del 31 de marzo. Allí se informó que la deuda era de $271.417 millones. En aquel momento, el dólar cotizaba a $20. El 76% de aquella cifra corresponde a préstamos en moneda extranjera.

La ausencia de datos actualizados generó múltiples pedidos de informes en la Legislatura, promovidos por los bloque de Unidad Ciudadana y del Frente de Izquierda en la Cámara de Diputados.

Quejas

"Por el solo efecto de la devaluación de este año el stock de deuda en moneda extranjera pasó de 190.000 millones a 380.000 millones de pesos", calculó el diputado Guillermo Kane (FIT), autor de uno de los pedidos de informes que buscan conocer la evolución de las finanzas públicas bonaerenses en los tres primeros trimestres del actual ejercicio presupuestario.

Según la oposición, esos $380.000 millones no incluyen la deudas colocada por la administración Vidal por un monto total de $110.000 millones.

En el presupuesto del corriente año, la Legislatura aprobó gastos por $629.962 millones y un défi­cit de $30.903 millones.

Para financiar ese dé­ficit y las amortizaciones del stock de deuda pública, por otros $36.000 millones, el gobierno de Vidal autorizó distintas fuentes financieras en el presupuesto 2018: una de ellas prevista en el artículo 32 del presupuesto 2018, por hasta $58.890 millones.

Hasta el momento, la provincia emitió un bono local por $30.000 millones, utilizando el 51% de lo autorizado.

"Adicionalmente, se encuentran vigentes previsiones por alrededor de otros US$1000 millones de posibles líneas de préstamo con organismos internacionales", alertó el senador Juan Manuel Pignocco (Unidad Ciudadana), quien dijo que, así, el stock de deuda actual ascendería a unos $470.000 millones.

De acuerdo con un estudio realizado por Pignocco, que integra la exministra de Economía provincial Silvina Batakis, "la deuda representaba un 45% del presupuesto provincial en 2015. Esa tasa creció a septiembre de este año al 75%".

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