Todos los jugadores profesionales de Gimnasia Indalo visitaron ayer la colonia de vacaciones del barrio Máximo Abásolo, junto al DT Gonzalo García, el asistente técnico Martín Villagrán y el jefe de equipo Néstor Chaves. El objetivo era compartir el almuerzo con los más de 150 chicos que concurren a diario a la colonia.

Tras saborear el menú general para todos de pollo y ensalada, los jugadores se dividieron de a dúos y jugaron con los chicos a las consignas recreativas propuestas por los profesores de la colonia. “La pasamos diez puntos, nos recibieron muy bien, compartimos el almuerzo con los chicos de la colonia y también los jugadores participaron de actividades recreativas, así que todo muy bien”, expresó el DT Gonzalo García.

El barrio Máximo Abásolo es uno de los más periféricos de la ciudad, con un contexto social complejo por el cual los niños y adolescentes llegan al gimnasio en busca de contención. “Para los chicos, conocer al plantel de Gimnasia es algo que no se van a olvidar nunca. Veníamos hablando con (el presidente del club) Juan Pablo Luque para ver si existía la posibilidad, antes de que se vayan a jugar de visitante, que pudieran venir y cumplieron, así que estamos muy agradecidos”, comentó Roberto Varela, vecinalista del barrio y quien maneja todo lo que ocurre en el gimnasio.

La visita a esta colonia no es casual. El club y el gimnasio tienen lazos que los unen, el primero de ellos es el nombre: “Lito Gioino”, en homenaje a Angel Vicente “Lito” Gioino, histórico dirigente de Gimnasia y Esgrima, ya fallecido. En este sentido, Varela reconoció: “es representativo que vengan a la casa de “Lito” Gioino, que además de haber sido dirigente de Gimnasia durante mucho tiempo fue el creador del proyecto de este gimnasio y por eso lleva su nombre. Además yo tengo el orgullo de tener la bandera de cuando Gimnasia salió campeón de la Liga Nacional en 2006, porque cuando inauguramos el gimnasio Lito me la regaló junto al plantel”.

Los chicos de la colonia se mostraron felices de poder tener a los jugadores de Gimnasia en su “casa”, pues aunque viven en la misma ciudad, muchas veces es difícil tener acceso a conocer o mirar los partidos. Luego de la visita y como en cada evento social que se realiza, el Club se comprometió a invitarlos al estadio Socios Fundadores cuando el equipo regrese a jugar en Comodoro Rivadavia, para que puedan disfrutar de un partido del máximo nivel del básquet nacional, un espectáculo que la mayoría de ellos nunca pudo ver.