Federico Gelay comenzó hablando del tratamiento del presupuesto 2016 y la suba de tasas en la sesión del jueves: “El presupuesto tiene un record de crecimiento del 63%, es el más rico de la Provincia de Buenos Aires, más que La Matanza que tiene ocho veces la cantidad de vecinos que San Isidro. Como si fuera poco amplían el presupuesto 2015 en 400 millones; esta viene siendo una práctica habitual del ejecutivo local para manejarlo de forma discrecional”.

En ese sentido subrayó que “habrá un 15% de aumento en las tasas en enero y luego un 30% a lo largo del año: en total un 45%. Es un aumento muy grande teniendo en cuenta de que el año pasado se aumentó un 52% el presupuesto y todos sabemos que este año hubo una inflación en torno al 26%, en San Isidro este año las tasas se ajustaron el doble. Es un municipio que le mete una presión fiscal tremenda a sus vecinos”.

Por otro lado se refirió al proyecto del oficialismo para regularizar los trapitos: “El proyecto ya tiene dictamen de comisión, fue presentado por el concejal Jorge Álvarez e iba a ser tratado en la última sesión ordinaria del año, lo sacaron el último día y lo iban a poner en esta próxima sesión extraordinaria y el comentario es que también lo van a sacar. El proyecto oficialista estipula crear un registro de trapitos en el que se pide que tengan más de dos años de residencia en el distrito, se les daría una pechera, un horario; el pago sería voluntario generando una fricción con el vecino respecto de cuánto está dispuesto a pagar si es que está dispuesto a pagar, porque puede decidir no hacerlo teniendo en cuenta de que el espacio es público. 

“El tema jurídico es gravísimo, en San Martín por ejemplo el anterior Intendente Ricardo Ivoskus antes de 2011 los había reglamentado, creando un registro y dándoles un horario. Cuando asume Katopodis empieza a avanzar con el estacionamiento tarifado y los empieza a correr; ¿cómo termina la historia?: a los meses más de 200 trapitos tomaron la planta municipal y lamentablemente el Intendente no tuvo otra opción más que pasarlos a planta permanente. El possismo busca repetir la trágica historia de San Martín, propone un precarización laboral encubierta con los trapitos; además de precarizarlos, el gobierno municipal y los comerciantes frentistas de dónde estén los trapitos trabajando, están expuestos a un juicio laboral” agregó. 

Por último hablo sobre su futuro político: “Estamos muy contentos en Consenso por San Isidro que es una fuerza plural, debemos seguir trabajando sin perder el diálogo con las fuerzas nacionales. Sigo trabajando con los vecinos, que en lo personal es lo que más satisfacción me da y si estoy comprometido con esta causa es por la fuerte vocación de servicio que tengo”.