"Parece que pasó un año, pero hace tres meses que estamos. Recién arrancamos", comenzó diciendo Gastón Acosta, subsecretario de Administración del Municipio, en exclusiva para Infoeme.

 

Definió estos 90 días de gestión de Ezequiel Galli como "muy intensos" y reconoció que "lo más difícil" es "adaptarse a la burocracia de la administración pública. Acostumbrarse que todo tiene un proceso administrativo, hay cosas para resolver urgentes pero se demoran por estos temas administrativos".

 

Este contador, olavarriense que vivía en Buenos Aires y regresó a la ciudad para acompañar a su "amigo de toda la vida", destacó que la política "tiene cosas muy lindas, hay mucho por hacer. A mi me emociona poder entregarle la llave de la vivienda a una persona que hace 16 años que la espera".

 

"Soy una persona de mucha confianza de Ezequiel. Él me ha dado la enorme responsabilidad que por acá pase todo lo que son compras, licitaciones, personal. Es una Subsecretaría bastante cargada", sostuvo Acosta.

 

Mencionó los primeros cambios a partir de su gestión: "Hemos logrado cambiar muchas cosas, como por ejemplo con las compras. El circuito de proveedores era muy cerrado. Nosotros le abrimos las puertas a un montón de gente que venía sorprendida de poder ser oferente en una licitación".

 

¿Cómo un Municipio que tenía un excedente de casi 80 millones de pesos, después de perder una elección el gobierno de turno pasó a que le queden 10? Eso es lo que hay que explicar, la gente tiene que entender eso... Cuando nosotros nos encontramos con esta situación, se nos complicó hasta para entregar las bolsas navideñas a los empleados.

El funcionario decidió aclarar los cuestionamientos surgidos en los últimos días luego de la designación de su esposa al frente de la Subsecretaria de Comercio Exterior y de su hermana en la "Casa de Olavarría".

 

En este sentido explicó que "en política uno tiene que tener un plan y un equipo armado" y consideró que se buscó "darle una impronta distinta a Olavarría respecto al comercio exterior", sostuvo.

 

"Lo importante es ver si las personas que ocupan los lugares están capacitadas para ocupar esos lugares. Me preocuparía más si mi mujer fuese ama de casa y la ponen al frente de una secretaría", declaró.

 

Respecto a la creación del área dedicada al comercio exterior dijo que "hay muchas empresas que exportan y muchas que son potenciales exportadoras" y manifestó que la "Casa de Olavarría es un modo de promover el turismo en la ciudad, hay mucho por hacer en materia de turismo acá".

 

La salida de Sergio Sarachu

"Yo no lo veo como algo tan complejo", consideró. "Otros tuvieron la suerte de sentarse en un sillón y recibir todo armado. El Intendente anterior heredó del padre el equipo de trabajo, una estructura en marcha, un municipio armado y que ya sabía como trabajaban todos", expresó Acosta.

 

Nosotros vamos a tener aciertos y errores. Cualquiera que no engrane en un equipo se tiene que ir. A Sergio le pasó eso.

 

Las críticas de la oposición

"Que desde el Concejo Deliberante se pongan en una posición de pedir explicaciones por cosas siendo que asumimos hace tres meses, de pedir explicaciones de por qué el Hospital está así, el Pickelado. Ezequiel está haciendo una gestión excelente, se está comunicando con gente de Provincia y Nación buscando cosas para Olavarría", declaró.

 

Acosta remarcó: "La gente no es tonta. Ellos piensan que la gente es tonta y no es así. Cualquier persona que se para en el Pickelado toma como un insulto que un concejal pida explicaciones sobre por qué están abandonadas las viviendas. Cualquier persona sabe que hacen años que están abandonadas".

 

No tienen otra cosa que hacer más que hablar. Que pidan explicaciones para ver qué se va a hacer con los fondos que vienen de Provincia, a mi me causa gracia.

Y se refirió a un tema puntual: "Yo no creo que haya sido problema nuestro en 90 días el tema de la filtración de rayos en el Hospital, que se lluevan los techos, los residuos patogénicos".

 

La "herencia"

"Asumimos y tuvimos que salir a pagar sueldos, aguinaldos, bono de fin de año que había acordado el Intendente anterior, con el gremio. Y nos encontramos con esa situación, no sabíamos de donde íbamos a sacar la plata para pagar todo eso. Que hayamos podido pagarlo en término fue un trabajo en equipo muy importante", dijo el contador Gastón Acosta.

 

Y agregó: "A todo esto hay que sumarle las colas de proveedores que venían a cobrar. 62 millones de pesos les debían a proveedores. Tenías al tipo que venía a cobrar 7 millones de pesos y el que venía por 2 mil, todos enojados porque los venían peloteando desde octubre. Y cuando perdieron dijeron 'anda que te pague Galli'" finalizó cuestionando el funcionario.

 

Las plazas y los parques son lindos y los vamos a mantener, pero también hay que entender que afuera de las cuatro avenidas vive gente. Gente que está olvidada y al Intendente le preocupa mucho esa gente.