“Esta es una fiesta popular que se había perdido y que de a poco está volviendo a las calles. Es importante acompañar el resurgimiento del carnaval y el trabajo que durante todo el año hacen las comparsas para lucirse en esta celebración que reúne a toda la familia”, celebró Galmarini.

Antes de su pasada, Los Auténticos de Boulogne, que cumplieron 10 años el pasado 22 de enero, le agradecieron a Galmarini la ayuda que recibieron para poder confeccionar los trajes color azul y blanco y comprar el calzado que vistieron los 200 miembros de la murga.

El legislador sanisidrense comentó: “Muchos vecinos no saben que las murgas cumplen un rol social en los barrios, donde contienen a un montón de chicos, jóvenes y adultos a través de la música, el baile y el trabajo en equipo”. Uno de los integrantes de “Los auténticos de Boulogne”, Javier Rodríguez, coincidió: “La murga une e integra el barrio. Nosotros siempre hicimos todo a pulmón, estamos muy agradecidos con la ayuda que nos dio Sebastián”.

Una vez finalizado el desfile de las murgas en San Isidro, Sebastián Galmarini se acercó al Gran Corso Familiar que organizó el municipio de San Fernando. Allí lo recibieron el presidente del Concejo Deliberante, Santiago Aparicio, y el concejal Juan Francisco Andreotti.